De vacunas se habla constantemente. Se dicen cientos de cosas, algunas con el respaldo de investigaciones rigurosas y otras como parte de un imaginario colectivo que en ocasiones genera alarma. ¿Qué creer y qué no?
Mucho se ha especulado respecto a la relación vacunas-autismo, incluso un supuesto artículo evidenció esto. Texto que fue desestimado tajantemente por pares y su autor alejado de la comunidad médica, pero en el cual se basan muchos movimientos antivacunas para justificar la postura.
Sin embargo, a esto se suma otro elemento no menos importante: las alergias.
No se trata de ser alérgicos propiamente a las vacunas, sino a la proteína que algunas contienen, siendo la más famosa la del huevo. Por lo cual, expertos han hecho un llamado para que esta no sea una excusa frente a la no vacunación de los niños, pero que se debe conocer para evitar una reacción alérgica aguda.
Rodolfo Jaller, alergólogo, inmunólogo clínico y médico internista, explica que en la práctica clínica diaria se encuentran con algunos casos donde los padres nos comunican que a sus hijos no les han puesto algunas vacunas infecciosas 'porque le han descubierto y diagnosticado que el niño está presentando alergia por el consumo de huevo'.
Un dato que no se debe dejar pasar por alto, pero que tampoco es sinónimo de no vacunación.
La alergia al huevo, sostiene el especialista, se presenta a partir del segundo semestre del primer año, 'usualmente a los 10 meses cuando se incluye el huevo en la dieta del niño'.
Lo primero en este caso es identificar cómo se pueden presentar estas alergias.
Las reacciones alérgicas más comunes son cutáneas como eritema, urticaria y el rash eczematoso, y ocurren a los 30 minutos de contacto o ingesta. 'La mayoría de las reacciones suceden con la primera exposición conocida al huevo en niños sensibilizados con dermatitis atópica', sostiene Jaller.
La anafilaxia (reacción alérgica aguda y potencialmente mortal) con el huevo se da en menos del 1% de todas las presentadas en niños.
'Los síntomas gastrointestinales pueden ser dolor abdominal y vómito en el 40-50% de los casos'. Una minoría de pacientes puede presentar inflamación del colon y recto alérgica o de la pared del esófago.
Vacunas. Llegado al punto de vacunación, en el plan ampliado de inmunización colombiano se dispone de tres vacunas que contienen proteínas de huevo: vacuna de la fiebre amarilla, antigripal y triple viral (sarampión, paperas y rubeola).
'Todas tienen un medio de cultivo que contiene embrión de pollo', sostiene el galeno.
'Se desconoce con exactitud la cantidad de proteínas de huevo presentes en la vacuna de fiebre amarilla —se ha descrito que es la que más contiene—; la antigripal tiene menos de 1-2 ng y la triple viral tiene menos de 1 ng'.
Las vacunas son seguras, afirma la Organización Mundial de la Salud. 'Todas las vacunas aprobadas son sometidas a pruebas rigurosas a lo largo de las diferentes fases de los ensayos clínicos, y siguen siendo evaluadas regularmente una vez comercializadas', dice la OMS.
El documento de posición de la Organización Mundial de la Salud frente a la vacuna de fiebre amarilla indica que está contraindicada 'para las personas con alergia grave a los huevos o con inmunodepresión grave'.
'En las personas sin alergia a los huevos se sabe que se producen reacciones alérgicas sistémicas, aunque muy raramente. La sensibilidad a la gelatina, utilizada con frecuencia para estabilizar la vacuna, puede explicar por lo menos algunos de estos casos', agrega.
Por lo cual esta vacuna está contraindicada en pacientes con historia de hipersensibilidad a cualquier componente de la vacuna, incluyendo al huevo o a los productos del huevo.
'Es la vacuna que mayor cantidad de proteínas de huevo contiene y se han descrito reacciones anafilácticas en personas alérgicas conocidas o, incluso, en personas de las que no se conoce su condición de alergia al huevo, por lo cual está contraindicada en las personas alérgicas al huevo'.
Se han descrito previamente controversias en la seguridad de la inmunización contra triple viral en niños con alergia al huevo, sin embargo, 'se ha demostrado que estos se pueden vacunar con seguridad contra esta tríada de enfermedades', dice Jaller. Varios conceptos explican por qué se recomienda la aplicación de la vacuna triple viral.
Las reacciones alérgicas, manifiesta Jaller, fueron causadas por otros componentes de la vacuna. Esto porque 'no contiene cantidad significativa de proteína del huevo detectable'.
¿Cómo? Porque se cultiva en células de fibroblastos derivadas del embrión de pollo y no en el embrión de pollo. 'La triple viral, por lo tanto, no está contraindicada en alergia al huevo', afirma el especialista.
Cifras. Se estima que entre 2000 y 2016, la vacuna contra el sarampión evitó unos 20,4 millones de muertes, según cifras de la OMS.
En cuanto a las antigripales, la OMS explica que la fabricación de estas 'se basa en la propagación del virus en huevos embrionados o en cultivos celulares adecuados'.
La vacuna de la influenza sí podría causar alguna reacción de hipersensibilidad, dado que se cultivan en el líquido extraembriónico de los embriones de pollo, 'con variación importante en el nivel de ovomucoide-ovoalbúmina (proteínas del huevo que podrían causar alergia) entre las diferentes casas comerciales', sostiene Jaller.
En 1976, en Estados Unidos se reportaron 11 episodios de anafilaxia (reacción alérgica aguda) no fatal seguidos a la administración de más de 48 millones de dosis de vacuna de influenza y un caso de anafilaxia fatal. 'Se considera que el episodio previo de anafilaxia al huevo es una contraindicación a la inmunización con la vacuna de influenza'.
Sin embargo, sostiene, las guías de Current Joint Task Force sugieren que la mayoría de los pacientes con alergia al huevo podrían recibir con seguridad la vacuna de la influenza' y hay estudios que muestran la tasa de reacción en un 0-6,2%'.
La Asociación Americana de Pediatría apunta que la aplicación con dosis única, apropiada para la edad, es bien tolerada en casi todos los pacientes con alergia al huevo, y no recomienda el uso de protocolos de estudios cutáneos o reto dividido en dos pasos.
Según los fabricantes, todas las vacunas contra la influenza contienen menos de 1 ng de ovoalbúmina por 0,5 ml de dosis, es por esto 'que la cantidad de proteína de huevo presente en la vacuna no es lo suficientemente alta como para inducir una reacción'. La cantidad mínima de proteína de huevo reportada para provocar una reacción alérgica es 130 ng.
Recientemente se han introducido dos nuevas vacunas contra la influenza que no se cultivan en huevos. Una se compone de virus en cultivo celular, aprobada para pacientes de 18 años y mayores. Otra es de proteínas de hemaglutinina recombinante, producida en una línea celular de insecto aprobada para pacientes de 18 a 49 años de edad.
Análisis. Que estas tres vacunas sean de especial cuidado, no significa que lo sean todas.
—¿Las vacunas por sí solas producen alergia?
—No. Las alergias descritas con las tres vacunas que contienen huevo son a los constituyentes y no al agente inmunizante, en personas genéticamente susceptibles—, dice el alergólogo.
La Academia Americana de Pediatría establece que las reacciones menos severas al huevo no contraindican la inmunización y los niños se pueden vacunar sin hacer test en piel.
Además, el comité de alergia alimentaria de la Sociedad Americana de Inmunología Clínica y Alergia Pediátrica recomienda que todos los niños con alergia al huevo pueden ser vacunados y deben permanecer 60 minutos después del proceso en el centro de vacunación.
'El conocimiento, las actualizaciones y el estar en una posición siempre a favor de la vacunación evitarán las consecuencias de la no vacunación en la población infantil', concluye.
Lo que dicen los análisis internacionales más recientes
Este domingo se publicó en el Canadian Medical Association Journal varios datos sobre las alergias a las vacunas. Derek Chu es becario en inmunología clínica y alergia en el Departamento de Medicina y Zainab Abdurrahman es profesor clínico asistente en el Departamento de Pediatría, dos médicos de la Universidad de McMaster realizaron este compilado. Uno de estos indica que, con la excepción de la vacuna contra la fiebre amarilla, una alergia al huevo no es razón para evitar las vacunas.
'No se requiere ninguna precaución especial cuando las personas que tienen alergia al huevo tienen influenza, MMR (vacunas contra el sarampión y la rubéola administradas juntas), o la vacuna contra la rabia porque la cantidad de proteína del huevo que puede contener es demasiado minúscula, dice la Agencia de Salud Pública de Canadá y la Sociedad Pediátrica Canadiense'. Existe también la posibilidad de generar reacción a los elementos de vacunación. Así que, en algunos casos, podría desestimarse la alergia a la vacuna como tal y ser más bien al látex o jeringa.
Además, si realmente tiene una alergia a la vacuna, los alergólogos pueden ayudarlo a inmunizarse a través de técnicas como la administración
gradual o administrar la vacuna poco a poco.