Tras un año de haberse declarado la emergencia sanitaria a causa de la covid-19, y en medio de una tercera ola de contagios que nuevamente ha llevado al límite a la infraestructura hospitalaria del país, pacientes de otras patologías manifiestan haber experimentado mayores dificultades para acceder al diagnóstico oportuno y a la atención especializada que requieren.
Isabel González, paciente de dolor crónico, indicó que tuvo que interrumpir su tratamiento porque los centros de salud han priorizado la atención de personas con el virus.
'En este momento es muy difícil encontrar una cita para programar los controles, mi EPS no entrega respuestas oportunas y a veces las únicas alternativas son las teleconsultas, que si bien pueden ser útiles en algunos casos, son insuficientes en otros', estima la psicóloga de profesión.
Según cifras de la Federación Latinoamericana de Asociaciones para el Estudio del Dolor — Fedealt—, el dolor crónico afecta a cerca de 190 millones de personas en Latinoamérica.
A nivel local y de acuerdo a una encuesta realizada por la Asociación Colombiana para el Estudio del Dolor —Aced—, el 46% de los consultados manifestó sentir algún tipo de dolor crónico.