La piel es el órgano más extenso del cuerpo, representa el 15% del peso corporal y cubre aproximadamente 1,7 m en el adulto promedio. Como órgano esencial, se encarga de proteger al cuerpo de agresiones externas y microorganismos, mantener el contenido corporal de agua y controlar la temperatura, así como de la regulación sensitiva y absorber la luz ultravioleta; todas estas funciones son fundamentales para una buena calidad de vida.