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Un estudio de la vida microbiana realizada por un grupo de microbiólogos de la Universidad de Illinois, reveló que hay una cantidad bárbara de virus en el cepillo de dientes y el cabezal de la ducha, en el baño.

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Sin embargo, al parecer los científicos indican que esto no debe ser alarmante, pues estos virus, que unos eran desconocidos, ayudan a destruir bacterias.

Y el motivo es porque algunos de los virus hallados se encuentran en la categoría de los bacteriófagos (o fagos), que sí infectan, pero destruyen bacterias.

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Erica Hartmann, quien lideró el equipo responsable del trabajo, señaló que: “La cantidad de virus que encontramos es absolutamente salvaje. Encontramos muchos virus de los que sabemos muy poco y muchos otros que nunca antes habíamos visto. Es impresionante cuánta biodiversidad encubierta hay a nuestro alrededor, frente a nuestras narices”.

Además, explicaron que en nuestro cuerpo habitan billones de bacterias, hongos y otros microorganismos. Estos conforman nuestra microbiota.

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Entonces, aunque el cepillo de dientes esté plagado de virus, puede luchar contra las bacterias que habitan en la boca. Los fagos que encontraron en el estudio son los que se enfrentan con esas infecciones bacterianas, que no pueden ser combatidas con antibióticos.

Para que este estudio diera esos resultados, fueron analizados 96 cabezales de ducha y 34 cepillos de dientes, y encontraron los viromas (la combinación de distintos tipos de virus).

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Asimismo, estos virus no eran los mismos en los dos lugares, es decir en cada uno se encontraba uno diferente. Por ejemplo, el del cepillo de dientes tenían las bacterias que están en la boca mientras que en el cabezal de la ducha son las bacterias de los sistemas de agua.