'Los jóvenes de América Latina y el Caribe tienen un gran potencial que si no se acompaña de las políticas correctas puede acabar desaprovechándose', afirma un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo.
El documento desarrollado por esta organización, compilado en el libro Millennials en América Latina y el Caribe: ¿trabajar o estudiar?, concluye que los jóvenes de este territorio son, en general, 'más optimistas acerca de su futuro'.
En la investigación, en la que participaron más de 15 mil jóvenes del continente, se detalló que el 85% de los encuestados tiene aspiraciones optimistas frente a su educación y oportunidades laborales. La investigación se desarrolló entre el 28 de abril y el 19 de mayo pasados.
Los millennials, o jóvenes del milenio, la generación que vio expirar el siglo XX y creció en los primeros años del siglo XXI, es ahora considerada un eslabón clave en la llamada nueva normalidad.
Nacieron, según la Asociación Americana de Psicología (APA, por sus siglas en inglés) entre 1982 y 1994. Y ahora a su lista de cambios se le suma el de una nueva normalidad. Una intempestiva variación en sus rutinas presenciales por efecto de la COVID-19, pero que los inmiscuye más en ecosistemas digitales y colaborativos.
A pesar de que el panorama a corto plazo no se muestra alentador, varios de ellos se muestran esperanzados en lo que podrá pasar luego de que la pandemia se acabe y además afirman que con sus talentos están dispuestos a aportar con esta nueva realidad.
'La pandemia del COVID-19 ha cambiado radicalmente nuestra forma de vida, la manera en que trabajamos, socializamos, compramos y más, y las generaciones jóvenes se vieron especialmente afectadas', indica Michele Parmelee, directora de People and Purpose de Deloitte Global.
Según Parmelee, a pesar de las condiciones inciertas y desalentadoras, los millennials y los centennials expresan 'una capacidad de resiliencia impresionante y muestran resolución para mejorar el mundo'.
Una reciente encuesta publicada por Deloitte revela que tanto millennials como centennials se mantienen resilientes frente a la adversidad y 'están decididos a impulsar un cambio positivo en sus comunidades y en todo el mundo'.
Francisco Mejía, comunicador social, fotógrafo y community manager, es uno de esos millennials que le apuesta con su discurso a impactar de manera positiva a su comunidad.
'Siempre trato de enviar un mensaje enfocado en entender que los cambios pueden ser positivos. A pesar de las situaciones que estamos viviendo y las cosas negativas que puedan afectarnos debemos reflexionar sobre los propósitos', afirma.
En medio de la pandemia, afirma que ha tratado de usar sus redes para incitar a los demás a aprovechar este tiempo para crecer y adaptarse a este nuevo entorno.
'Para mí es difícil llamarle nueva normalidad. En este momento lo que percibo como normal es cuidarnos más, protegernos y mantener muchos protocolos de seguridad (...) Debemos mantener la percepción de que esta situación será normal por un periodo temporal. No será así para siempre', expresa.