¿Qué tienen en común el Carnaval del Atlántico y de Barranquilla, el Carnaval de las Artes, el Teatro Amira de la Rosa y los cines? Pues que en torno a sus numerosos eventos se congrega el público local y visitante, generalmente de forma masiva, para entrar en contacto con las diversas manifestaciones artísticas del mundo cultural.
Conciertos musicales, funciones de cine y de teatro, exhibiciones de arte visual, recitales poéticos, charlas de todo tipo han hecho parte de la agenda que nutre a estos escenarios que cada año han sido albergue para la fiesta, la representación, el contacto con los otros y la vida en común.
Es prioridad, por esto, custodiar, como participantes o espectadores, la manera en que cada uno garantiza su supervivencia y continúa estimulando la asociación entre el público, el escenario (virtual o presencial) y el esfuerzo mancomunado de cada expresión estética.
EL HERALDO hace un recuento de los retos y del futuro que proponen y se construye alrededor de estos espacios para el 2021. Algo está muy claro: sus acciones no podrán desligarse de una adaptación de sus prácticas fundamentales y de las etapas de vacunación contra el Covid-19 que se espera inicie en el país lo más pronto posible en el año que mañana comienza.
