Hace ocho años manos criminales en Sincelejo apagaron a bala la voz del cartagenero John Jairo Sayas Díaz, conocido artísticamente como ‘El Sayayín’, considerada una de las leyendas de la champeta.
Con éxitos como Paola, La píldora, El extracto de mango, La pistera o La suegra voladora (La nubecita) conquistó muchos seguidores a nivel nacional, los cuales hoy con nostalgia escuchan lo mejor de su repertorio, ese que literalmente ponía a todos a volar por la pista de baile.
Desde entonces se extraña a esa figura delgada, de caminar y voz lenta, pero que una vez empuñaba el micrófono le daba rienda suelta a todo su carisma.
Su legado musical ha deambulado todo este tiempo, y ahora aparece uno de sus cinco hermanos paternos, Luis Eduardo Sayas Senior, procedente de la localidad de Petare (Caracas-Venezuela), para levantar su bandera y seguir haciendo champeta a su estilo.
Este joven de 29 años, que migró hace 11 meses a Cartagena en búsqueda de mejores oportunidades, tiene un gran parecido físico y en el registro vocal con ‘El Sayayín’, aspectos que toma como punta de lanza para debutar a nivel artístico.
'Me vine para Colombia en búsqueda de nuevas oportunidades, llegué vendiendo peto, jugos y pescado, la gente que me compraba se quedaba asombrada al ver mi parecido con mi hermano. Eso me motivó a seguir su legado, sé que tengo muchas cosas en común, pero en especial las ganas de luchar', dijo el venezolano en diálogo telefónico con EL HERALDO.
A Luis Eduardo le ha tocado trabajar fuerte por cristalizar sus sueños, en el vecino país se ganaba la vida como conductor de bus, y fueron sus compañeros los que lo motivaron a no desfallecer.
'Dios me regaló este talento y lo voy a explotar, esto del canto es algo que llevo en la sangre. Muchas de mis amistades me decían que luchara por mi sueño de ser cantante, que viajara a Colombia, el país donde ya había triunfado mi hermano y tuvo muchos seguidores que de seguro me respaldarían, pero yo sentía miedo. Finalmente no soporté más la crisis económica que vive Venezuela, decidí venirme a luchar por lo mío y aquí estoy enfocado en el canto'.