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Maullar es su manera de expresar los nervios que siente al momento del despegue o el aterrizaje. Fergie Isabella, la gata de Sandra Rivas, ha viajado varias veces en avión. 'Siempre debo prepararla antes de viajar para que haga sus necesidades, la intento calmar mientras volamos. Soy precavida y llevo una toalla por si acaso, además Fergie tampoco toma agua o come en el trayecto', menciona Rivas, que a su vez anota que su mascota siempre tiene la vacunación al día y antes de los recorridos acude a un veterinario para hacer una revisión que confirme que el animal está apto para viajar.  

También relata que es complicado cuando Fergie debe pasar por el detector de metales, ya que queda expuesta, así que debe tener precaución porque no sabe qué reacción tenga al salir de esta caja. 

Los viajes son la mejor opción cuando se quiere salir de la agotadora rutina y respirar otros aires para recargar energías. Para algunos el acompañante infaltable es su mascota. No obstante, el llevarla de viaje requiere de unos cuidados específicos que si no se saben manejar, su paseo se puede convertir en tormento. 

El médico veterinario Javier Rivas dio unas pautas claves al momento de viajar al lado de su animal de compañía.

Cuando se trata de viajes en carro particular la recomendación del experto es llevar el collar, para que este no salga corriendo si los propietarios se bajan del carro. Además, es importante mantenerlos hidratados durante todo el camino. Cuando son gatos lo ideal es transportarlos en un guacal, ya que suelen ponerse nerviosos.