'En la India encontré una luz, la espiritualidad y el amor', dijo Jairo Vergara mientras permanecía sentado en la sala de su casa ubicada en el corregimiento de Salgar (Puerto Colombia). En ese momento Yasmín, su esposa, estaba en la cocina terminando de preparar un humectante capilar de hojas de guayaba y canela para su hijo mayor.
Amirudin, el mayor de sus cuatro hijos, tocaba la guitarra en la puerta mientras que Omeralicia, su hermana, se mecía en la hamaca guindada en la terraza. Al mismo tiempo Ahmed permaneció en el segundo piso y Taher cantaba un reguetón que escuchaba a todo volumen.
Hace más de 20 años esta familia llegó a Colombia con sus bases sentadas en la energía, el arte y lo espiritual. En lo que trasciende y no es estático. El teatro ha marcado sus vidas y sigue siendo una de las razones que los mantiene unidos.
Jairo Vergara, quien es docente de Arte Dramático de la Universidad del Atlántico, conoció a su esposa, Yasmín Jasdanwala, maestra de teatro y yoga, originaria de Bangalore (India), mientras estudiaba becado en una universidad de ese país.
'Cuando llegué a la India un amigo me dijo que había un colectivo de teatro parecido al que yo tenía en Barranquilla, ella era miembro. Tres años después hicimos una obra y ahí comenzó el romance, nos enamoramos e hicimos una gira por España, Alemania y luego nos vinimos a vivir aquí', explica Vergara.