Después de dos años largos de espera, la Vía 40 fue un derroche de sabrosura por parte de cumbiambas, comparsas y grupos folclóricos.
Después de dos años, las carrozas, los disfraces y las comparsas, revivieron el espíritu carnavalero en el Cumbiódromo.
Después de dos años largos de espera, la Vía 40 fue un derroche de sabrosura por parte de cumbiambas, comparsas y grupos folclóricos.