Uno de los íconos del humor costeño es sin dudas Rafael Jiménez Zequeira, quien por razones de sonoridad decidió darle mayor protagonismo a su apellido materno, siendo conocido durante 35 años como Rafael Zequeira.
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En este tiempo ha logrado sacarles carcajadas a varias generaciones que lo recuerdan por personajes como: Compa’e Lencho, La Popis, Panchirri, El viejo Chole, Aniceto, entre otros.
Este hombre nacido en Villanueva, La Guajira, criado en Valledupar y que se convirtió en toda una figura desde Barranquilla, a sus 68 años, se ha mantenido vigente, valiéndose incluso de las redes sociales para llegar a nuevas audiencias.
'Yo nací prácticamente con el canal Telecaribe, no pensé que iba a durar tanto tiempo, pero hice del humor mi refugio ante los problemas'.
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Antes de ser humorista, trabajó como conductor de tractomula en La Mina, un trabajo muy duro que lo llevó a reflexionar sobre su futuro, y en una temporada de Carnaval, encontró la respuesta para mejorar su calidad de vida.
'En La Mina éramos 3.000 hombres y pocas mujeres, crearon un reinado y la parte administrativa envío a sus representantes, pero nosotros no teníamos reina y yo me vestí de mujer y me pasearon en un camión y todo el mundo se reía, por eso gané. Yo vivía haciendo chistes y bromas a los compañeros, por eso todo el mundo me decía que me dedicara al mundo de la televisión'.
Ese año se quedaría sin trabajo y decidió seguir el consejo de sus compañeros y tocó puertas en Telecaribe, integrando el elenco del programa Sabro Show, que lideraba Ley Martin. Pese a que refirió el chiste más malo de su vida, Rony Laitano, que integraba el elenco le dijo a Ley que tenía talento y fue contratado.
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'Empezamos a hacer sketches de chistes, luego me aconsejaran que creara un personaje campesino, pero con mucha plata, y como yo viví mucho la época de la marimba en mi tierra. Imagínate yo vi al Gavilán Mayor mandar a llenar una piscina de vino de manzana porque se quería bañar con la novia ahí, y así le di vida al compadre Lencho'.
Rememora el primer chiste protagonizado por Lencho: 'Llegué con una joven a un restaurante a comer y ella pidió ancas de ranas, y le dije mija pida la rana completa que lo que tengo es un bojote e’ plata que no se lo brinca un chivo', dijo con su natural desparpajo.
