Todos los días, en algún rincón del mundo, alguien lucha por su última oportunidad, su única carta de vida: un trasplante de órgano, hecho que se conmemora cada 27 de febrero para fomentar la donación y reducir las listas de espera de pacientes necesitados.
Y es que detrás de cada trasplante, yace el gesto altruista de aquellos que, en vida o en su tránsito hacia la eternidad, han decidido regalar una segunda oportunidad.
Por ello, un día como hoy se celebra no solo este milagro de la medicina sino también el altruismo, la solidaridad, el avance científico y tecnológico, y la capacidad de los especialistas que lo hacen posible. También se invita a reconocer la importancia de la donación de órganos y a incentivarla.
De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Salud (INS) a septiembre del año pasado las cifras de trasplantes y donantes en el país mostraron un aumento significativo. Los trasplantes se incrementaron 21 %, los donantes por muerte encefálica crecieron 15%, los donantes vivos 12 % y los de tejidos 24 % con respecto al 2022.
Y en datos tomados de RedDataINS, a 30 de septiembre de 2023 se llevaron a cabo 1.066 trasplantes de órganos entre trasplantados con donante vivo y fallecido en muerte encefálica. Esto es 24 % más de los realizados para el mismo período de 2022 a partir de donante fallecido por muerte encefálica, que fue de 88 %, y 12 % más de donante vivo.