Devoción y consagración son las palabras que determinan la entrega religiosa de un mismo municipio en la temporada de Semana Santa.
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Más que una fiesta religiosa, para muchos en Sabanalarga, Atlántico, esta temporada es esperada para renovarse a nivel espiritual. Es por ello que a lo largo del año trabajan en la agenda para venerar a Dios y a los santos patronos.
Por su credo y amor a esta tradición, una compañía de nativos de este municipio cooperan en conjunto desde sus profesiones y saberes para hacer un gran aporte a esta festividad que resulta ser un atractivo para quienes no son oriundos de allí, pues en esta época Sabanalarga es muy visitada por turistas. Esta organización empieza desde la Alcaldía y el secretario de Hacienda municipal, Jorge Federico Hoyos, que es el presidente de la Semana Santa de Sabanalarga.
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'Esto es un relevo generacional grandísimo. La persona que me antecedió en la presidencia de esta fiesta religiosa tenía 74 años, y yo era un joven de 25. Ya tengo 15 años al servicio de la presidencia y hago parte de la nueva generación que busca preservar y fortalecer el patrimonio más hermoso que tiene esta tierra. Aquí tenemos un espíritu muy católico y tratamos de cuidar la riqueza que hace parte de nuestra fe', anotó.