Dispuestos a revelar la historia de sus vidas entre sentimientos contrapuestos, pero a la vez con mucha serenidad y un deseo de transmitir un mensaje de esperanza, Elizabeth Marcial y sus hijos Daniel y Santiago cuentan desde sus vivencias lo que ha significado batallar a diario con el trastorno del espectro autista, sumándole diversas situaciones sociales complejas en las que se han visto envueltos, algo que indudablemente ha marcado un antes y un después en sus vidas.
Y es que hoy, en la conmemoración del Día Mundial de la Concienciación del Autismo, ya no existe dolor alguno para esta madre al relatar el proceso de varios duelos como la tentativa contra la vida de su familia, varios intentos de suicidio de su hijo menor, dos separaciones y el rechazo social en distintas ocasiones.
La mujer ha logrado superar con amor, paciencia, resiliencia y valentía aquello que hubiese podido destruir a muchos, pero que a ella le dieron valor para seguir en su lucha por defender su vida y la de sus seres amados. En la comodidad de su hogar, Elizabeth cuenta esta historia de superación.
'Antes que nada quiero aclarar que no soy profesional de la salud mental, no estoy respaldada por algún diploma que diga que soy psicóloga, psiquiatra o trabajadora social; hablo desde mi experiencia como la mamá, la representante y la persona que provee los cuidados principales de mis hijos que son Daniel y Santiago, dos chicos con el trastorno del espectro autista'.