Comprar una chicha cremosa es una de las opciones preferidas por los barranquilleros para refrescarse. Sin duda alguna, en los últimos meses los chicheros y amantes de esta bebida ancestral han recuperado la tradición.
- Lea: Colombianos definen como útiles sellos en los ultraprocesados
- Vea: El folclor costeño se toma el Festival de Jazz de Nueva Orleans
- Aquí: Francia Márquez asistió al FICCI para el estreno de su biopic ‘Igualada'’
Y es que para muchos, más allá de ser rica, la chicha logra desempolvar algunos recuerdos de la infancia y adolescencia. Era esperar con ansias los recreos, para comprar un vaso al señor que la vendía en la puerta del colegio o esperar hasta el final de la jornada escolar para ir a casa degustando la típica mezcla de crema y leche en polvo.
La chicha fue traída por los españoles en el siglo XVII. En aquel tiempo era muy popular, pues se consideraba la bebida favorita de los españoles en las fiestas coloniales, y hasta hoy no ha dejado de gustar. Existen diferentes preparaciones que la hacen única, incluso nuevas presentaciones se encuentran hoy en el norte de la ciudad.
(Le puede interesar: Ryan Castro se le mide a la salsa con el tema ‘El Cantante del Ghetto’)
EL HERALDO realizó un recorrido en tres puntos de la ciudad, Topping Chicha, Chicha La Holandesa y La Chicha de don José, quienes han llevado este popular producto a otro nivel.
