La moneda venezolana fue fabricada en 1886 y cuenta con la cara de Simón Bolívar. Aunque el valor al que equivale la moneda es de tan solo 100 bolívares, lo que verdaderamente lo hace un tesoro es está hecha de oro de 22 quilates y debido a su antigüedad se ha convertido en una de las más difíciles de encontrar, por lo que la convierte en una pieza valiosa.
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Algunas personas suelen coleccionar dinero por distintas razones: a modo de recuerdo de los países que se encuentran visitando en el momento, como un razón para recordar la efeméride o la situación en la que se encontraba dicho país en el momento, en forma de ‘hobbie’ o colección y, por supuesto, a sabiendas que dicho dinero puede tener más valor en el futuro y podría ser vendido a un mayor valor de lo que en realidad equivale.
Lo cierto es que detrás de la moneda antigua de 100 bolívares hay muchas historias que contar y estas hacen que su importancia tome mayor relevancia a la hora de ser vendida. En primer lugar, esta pieza destaca por ser la primera moneda de oro acuñada en Venezuela. Cabe aclarar que anteriormente las monedas y billetes eran denominadas por nombres, por ejemplo, la moneda de 100 tenía como nombre “Pachano”.
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El nombre de la moneda se da debido al general Jacinto Pachano, ya que él fue quien le mostró un ejemplar recién elaborado al entonces presidente Antonio Guzmán Blanco. Otro dato importante es que la fabricación de esta moneda inédita se dio en la época que Venezuela se llamó Estados Unidos de Venezuela.
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Cabe aclarar que esta moneda tiene unas características y solo podrá ser vendida si cuenta con las siguientes especificaciones:
