Es un error pensar que las personas sordas no pueden realizar actividades que están directamente relacionadas con sonidos o que no pueden llevar una vida normal.
Uno de los ejemplos más representativos de lo dicho anteriormente es la perspicacia que tiene el joven bogotano Julián Gómez para tocar el piano, él es un chico que nació con discapacidad auditiva.
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Los padres de Julián, Lina Ramírez y Germán Gómez, se dieron cuenta desde los seis meses de vida de su retoño que no respondía a los sonidos ni a los estímulos, aunque su desarrollo siempre fue normal.
A la edad de siete años aprendió a tocar piano y hasta hoy aún lo sigue haciendo, ya que se convirtió en su pasión.
Esto es una muestra de que aunque las personas sordas enfrentan desafíos día a día, no es impedimento para que puedan realizar actividades iguales a las que ejecutan las personas que no están impedidas de escuchar, ni tampoco es completamente cierto que todos los sordos son mudos.
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Por ello, EL HERALDO dialogó con la especialista en audiología Julieth Lozano, quien explicó las causas comunes de la sordera y las opciones de tratamientos que existen. Por su parte, Lina Ramírez, madre de Julián, detalló su historia y habló sobre las creencias que tienen las personas con respecto a los sordos.
Causas de la sordera
La especialista explicó que las causas más comunes de la sordera provienen de enfermedades hereditarias como la autoesclerosis, que tiene una mayor prevalencia en mujeres de 30 a 50 años.
“También está la presbiacusia, que es el desgaste de nuestro órgano auditivo, de nuestras células ciliadas, también por la edad. Esto perjudicaría principalmente a este grupo etario de personas adultas mayores de unos 60 años”, explicó Julieth.
Otra de las causas son las hipoxias, que es la falta de oxígeno al momento de nacer, el sufrimiento fetal o inmadurez pulmonar, que podría llegar a afectar a órganos pequeños recién nacidos y la exposición prolongada al ruido, junto al consumo de medicamentos tóxicos para el oído.
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Estas pueden afectar a personas de todas las edades.
¿Los sordos hablan?
La realidad es que algunas personas sordas hablan muy bien y con claridad; otras no lo hacen porque su pérdida auditiva les impidió aprender el lenguaje hablado.
La sordera suele afectar poco las cuerdas vocales y un pequeño porcentaje de personas sordas son realmente mudas. A pesar de que Julián nació siendo sordo, habla muy bien.
“Cuando nos dimos cuenta de la sordera de Julián, consultamos a especialistas que le mandaban varios exámenes y citas. Entonces fue candidato para un implante coclear, lo que le permite a las personas sordas recibir y procesar sonidos; nosotros no sabíamos nada del tema, y por ello empezamos a indagar cuáles eran las alternativas más efectivas para su caso”, contó Lina Ramírez.
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Al año y medio fue implantado en los dos oídos y hasta el día de hoy, que tiene 17 años de edad, depende 100 % de sus procesadores auditivos. Afortunadamente Lina y Germán fueron guiados por otólogos, audiólogas y fonoaudiólogas, que también les explicaron que los sordos pueden hablar muy bien.
“El desafío más grande que tuvimos con él era que pudiera hablar, es que yo pensaba que los sordos no podían hablar. Mi hijo toca piano hermoso, entonces nos ha enseñado que los límites solo están en la mente”.
