En el extendido panorama musical de Colombia, dos figuras muestran toda su fuerza desde hace algún tiempo, llevando el folclor colombiano a varios rincones del mundo donde su ritmo y su esencia son cada vez más apreciados.
Orito Cantora y Jenn del Tambó no solo son artistas talentosas, sino que también son embajadoras de la rica herencia cultural del Caribe. Ellas han logrado internacionalizar la música tradicional colombiana.
Orito Cantora, originaria de Barranquilla, ha dedicado su carrera a resaltar la riqueza de la música afrocolombiana. Con una trayectoria que abarca más de dos décadas, su estilo es muy fiel a ritmos tradicionales como el bullerengue y la cumbia con elementos contemporáneos que evocan la ancestralidad, creando un sonido único que resuena, crea expectativas y causa curiosidad en otras culturas con su canto y toque de maracas.
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Por su parte, Jenn del Tambó, oriunda de Barrancabermeja, Santander, pero radicada en Barranquilla, ha revolucionado la manera en la que se puede tocar un tambor alegre. Con su enfoque vivo en el folclor ha logrado llamar la atención de una nueva generación, puesto que en sus presentaciones puede tocar distintos instrumentos a la vez, sin dejar de lado su instrumento principal.
Juntas hacen un dueto de impacto que convoca todas las piezas de la música folclórica colombiana, incluyendo otros instrumentos infaltables como la tambora, llamador y maracas.
Al tocar alguna de sus canciones tienen la capacidad de dominar cualquier cuerpo y erizar la piel precisamente por la energía que transmiten.
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Las dos artistas, desde la Intendencia Fluvial, en pleno centro barranquillero, reflexionaron sobre su trayectoria y cómo han dejado en alto el nombre de Colombia a través de su música.
Coincidieron en un festival
En una correría de festivales culturales, Grace Lascano, conocida en el ámbito de la música como Orito Cantora, aprendió la manera idónea de interpretar los ritmos folclóricos del Caribe colombiano entre encuentros y ensayos con grupos que se dedicaban a tocar cumbia, chandé, bullerengue y música de gaita.
“Hace más de 20 años estoy con la música tradicional del Caribe colombiano con sede aquí en Barranquilla, donde aprendí por medio de festivales todo lo que sé de nuestra música. En una de estas correrías por los festivales es que conozco a Jenn, en el Festival de Gaitas de Ovejas, Sucre, y ahí hicimos click, luego empezamos a trabajar casi que al año”, contó Orito.
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Desde los 10 años, Jennifer Meza interpreta el tambor, la tambora y la gaita, teniendo en cuenta que en su tierra natal estos son los instrumentos que más se tocan. Su formación en la música fue en la OFP (Organización Femenina Popular). “Yo la invité a tocar en mi banda Orito Cantora y la chalupa, y como todo va evolucionando, decidimos hacer un dueto. Además, creamos la Red de Tamboreras de Colombia, donde les enseñamos a las mujeres de todas partes a tocar el tambor de manera gratuita”, agregó la cantadora.
Traspasaron fronteras
A través de la Red de Tamboreras lograron llegar a Suiza, donde trabajan con mujeres latinas y no latinas, y en el camino se han encontrado con grandes experiencias en intercambios culturales, con los que aseguran no se quedarán conformes.
“Las mujeres con las que trabajamos en Suiza aprenden a tocar los ritmos de Colombia haciendo cantos originales y logran producir un sonido diferente al mismo tiempo. Sumado a eso, siempre buscamos transmitir el mensaje de que la única piel que debe ser golpeada es la del tambor, con la única intención de buscar un punto de equilibrio en nuestro género. Con esto hemos logrado hacer una plataforma grande de visibilidad, que nos ha permitido llegar lejos”, dijo Jenn.
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Orito y Jenn han ganado distintos concursos que les han permitido estar y aprender en otros países como Brasil, donde empezaron a construir un gran sueño.
“En el año 2016 nos ganamos una convocatoria internacional de Brasil para hacer una residencia artística. Ahí pudimos ver que había un hambre de cumbia y vimos una oportunidad para expresar nuestros sonidos. Como solo éramos dos, decidimos hacer una batería folclórica y eso causó más curiosidad, porque nos veían tocar varios instrumentos a la vez y además cantar”, anotó Orito.
Seguirán expandiéndose
Hace poco, la dupla volvió a ganar una convocatoria en la capital del Atlántico. Se trata del Portafolio de Estímulos de la Alcaldía de Barranquilla, victoria con la que planean seguir trabajando en darse a conocer más y, sobre todo, dejar el legado ancestral en todo el mundo. “Aplicamos una vez más al Portafolio de Estímulos, para circulación internacional y nos lo ganamos. En otras ocasiones hemos aplicado para hacer discos, talleres y para hacer una canción. Estamos muy felices porque es la primera vez que ganamos en esta categoría y tenemos muchos ánimos para llevar nuestros tambores a otro nivel”, expresó Orito.
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Ambas artistas han sido fundamentales en la promoción de la música colombiana en el extranjero. A través de sus giras y colaboraciones, siguen consiguiendo que el folclor colombiano no solo sea escuchado, sino también celebrado en diversas culturas.
“A pesar de que en otras partes del mundo tocan instrumentos que son más de latin percussion, siempre logramos hacer algo muy bonito con distintas sonoridades y eso nos llena”, concluyó Jenn del Tambó.
