En la búsqueda de una piel radiante y saludable, muchas personas se enfrentan a un mar de productos y consejos que prometen resultados milagrosos.
Sin embargo, el resultado de una piel radiante y saludable se debe a unos continuos hábitos, que no tienen por qué ser complicados.
Aunque no todas las pieles son iguales, y para cada una existe un tratamiento diferente, EL HERALDO dialogó con la dermatóloga Paola Cárdenas, quien dio algunos tips fundamentales que ayudarán a mantener un rostro saludable, mientras que la nutricionista Diana de la Ossa, explicó que llevar una buena alimentación aportará a lucir un rostro más radiante.
Pasos indispensables
La limpieza es el pilar del cuidado de la piel. Es indispensable eliminar todas las impurezas como el maquillaje y exceso de grasa al final del día. Así lo explicó la dermatóloga Cárdenas.
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“Es importante seguir la rutina del cuidado de a piel con tan solo tres paso. Se debe hacer una limpieza en la mañana y la de la noche es la más importante, nunca hay que olvidarse de retirar el maquillaje, la humectación se debe hacer de acuerdo a cada tipo de piel y en este punto, es indispensable consultar a un dermatólogo para saber que le favorece a nuestra piel”, dijo la especialista.
Adicionar antioxidante como los sérum, que son fáciles de aplicar y se absorben rápidamente con vitamina C o Niacinamida entre otros, también es clave.
La exposición al sol es uno de los principales factores que contribuyen al envejecimiento de la piel. Así que aplicar un protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30, evitará manchas y arrugas.
“La fotoprotección es necesaria cada 3 a 4 horas, así el día este nublado, el protector solar es uno de los productos que siempre deben hacer parte de la rutina diaria e inclusive, pueden ser con color para reforzar el maquillaje”.
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Finalmente, utilizar un limpiador suave adecuado para cada tipo de piel, ya sea grasa, seca o mixta, completará esta serie de pasos. Según las recomendaciones de la dermatóloga Paola Cárdenas, esta rutina se debe hacer tanto por la mañana como en la noche, para mantener los poros limpios y la piel fresca.
Descanso y maquillaje
Un buen descanso es vital para la salud de la piel. Durante la noche, el cuerpo se repara y regenera. Intentar dormir al menos 7 u 8 horas diarias para que la piel luzca fresca al despertar. “En la noche muchas células de las capas profundas de la piel se regeneran y sustituyen a otras superficiales que ya están deterioradas o dañadas.
El sueño permite que el organismo descanse y se recupere, así que descansar adecuadamente hace que las células dañadas se reparen. Con esto igualmente evitamos el envejecimiento rápido, líneas de expresión y ojeras”.
El adecuado cuidado de la piel antes y después del maquillaje es necesario para obtener una piel uniforme y radiante. Además, estos pasos protegen a la piel de los efectos negativos de los productos de maquillaje y mejoran la apariencia del maquillaje.
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“En cuanto a los maquillajes, se recomiendan productos hipoalergénicos, idealmente de marcas reconocidas que hagan este tipo de test, y en lo posible si tienen protección solar adicional, pueden ayudar a reforzar la fotoprotección que no reemplaza el maquillaje y pueden brindarle un mayor cuidado a nuestra piel”, afirmó Paola.
Belleza desde adentro
Lo que se consume se refleja en la piel, este es el órgano más grande del cuerpo y refleja sin disimulo por la carencia de vitaminas, proteínas o minerales.
Según la nutricionista Diana De La Ossa, incorporar a la dieta alimentos ricos en antioxidantes, como frutas y verduras, mantener una buena hidratación bebiendo suficiente agua a lo largo del día, y aportar al cuerpo Omega-3 presentes en pescados grasos y nueces, también son beneficiosos para mantener la piel elástica.
“Las frutas y verduras de colores vivos como los frutos rojos, zanahoria, espinaca, remolacha, entre otras, ayudarán a tener una buena fuente de vitaminas. También es importante consumir vitamina E, que se encuentra en las almendras, semillas de girasol, en el aguacate y el aceite de oliva extra virgen”, explicó la nutricionista.
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Por su parte, el estrés puede tener un impacto negativo en la piel, provocando brotes de acné y otros problemas cutáneos.
“La salud intestinal también puede verse afectada en la piel, y esto depende mucho de la alimentación y el nivel de estrés que una persona puede manejar. Por eso recomiendo consumir alimentos con probióticos como el yogur, chucrut y kéfir, al igual que alimentos con fibra prebiótica como el ajo y cebolla”.