En el tercer día de la Feria Internacional del Libro de Barranquilla, Atlántico y el Caribe (FILBAC) que se cumplirá hasta el domingo en el Centro de Eventos Puerta de Oro, la voz de la fallecida escritora barranquillera Marvel Moreno, retumbó con mucha fuerza, gracias al espacio denominado ‘Cartografía de lo femenino en la obra de Marvel Moreno’, un conversatorio en el que interactuó la experta en estudios feministas y de género en la literatura Mercedes Ortega y Adriana Martínez-Villalba, directora de la Biblioteca Nacional de Colombia.
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Ortega, quien escribió el libro ‘Cartografía de lo femenino en la obra de Marvel Moreno’, compartió con el público su análisis sobre esta recordada literata costeña.
Marvel Moreno, es una de las escritoras más influyentes de la literatura latinoamericana, sigue siendo un enigma tanto para sus lectores como para los investigadores de su obra.
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Aunque su narrativa ha desafiado las estructuras sociales y culturales de su tiempo, su vida personal permanece en las sombras, carente de una biografía oficial o registros significativos que den cuenta de su paso por escenarios literarios como París, donde se relacionó con figuras del Boom Latinoamericano como Octavio Paz y Gabriel García Márquez.
Este vacío documental, según Mercedes Ortega, investigadora y ávida lectora de su obra, ha contribuido a magnificar el misterio que rodea a la autora.
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Moreno, descrita como una mujer reservada y discreta, mostró en su escritura una voz contundente que rompió con los moldes literarios y sociales de su época. Ortega señala que su fascinación por la autora nació al notar la ausencia de perspectivas femeninas en los clásicos que había estudiado.
“La obra de Marvel Moreno no solo me permitió identificarme con las historias, sino que iluminó aspectos de la vida de muchas mujeres del Caribe que rara vez han sido abordados en la literatura”, explicó.
A través de sus relatos, Moreno dio voz a experiencias femeninas y caribeñas profundamente marcadas por desigualdades y conflictos de género, una perspectiva que hasta entonces había sido ignorada en la narrativa de la región.
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Uno de los aspectos más destacados de su obra es la construcción de personajes femeninos complejos. Estos personajes, según Ortega, desafían abiertamente las normas sociales, aunque ello conlleve graves consecuencias.
Tal enfoque narrativo, argumenta, refleja episodios de la propia vida de Moreno, como cuando fue expulsada de su colegio por defender el darwinismo o su decisión de casarse con un intelectual en lugar de alguien de su propia clase social, un acto que desafió las expectativas impuestas por la élite barranquillera de la época.
En su obra, Moreno aborda con crudeza la realidad de las mujeres atrapadas en relaciones opresivas, víctimas de violencia física y emocional, para quienes el amor se convierte en un encierro y la sociedad en un espacio de conflicto constante. A través de estas historias, la escritora desmenuza las tensiones de género y expone las contradicciones de la vida caribeña con una profundidad sin precedentes en la literatura de su tiempo.
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Hoy, Marvel Moreno no solo es reconocida por la calidad literaria de su obra, sino por su valentía al exponer las estructuras sociales que perpetuaban las desigualdades de género. Su legado sigue siendo una invitación a explorar las realidades femeninas y a cuestionar los silencios que aún persisten en la literatura y en la historia.
