Recientemente el compositor Juan Fabio Lagos se pronunció en redes sociales para dar declaración sobre la situación relacionada con su tema ‘El Secuestro’. En el video explica que le prohíbe al Mono Zabaleta interpretar dos de sus canciones.
La controversia surge tras el incumplimiento por parte de Zabaleta de un acuerdo previamente establecido, en el cual se comprometía a reconocer y remunerar debidamente los derechos de autor de Lagos en un plazo determinado.
Lea: Villancicos que tienen alma folclórica desde Alameda
Según Lagos, a pesar de las negociaciones iniciales y el compromiso firmado por ambas partes, el artista no cumplió con las condiciones económicas acordadas.
“Antes del lanzamiento del álbum ‘Mono’, que incluye dos de mis composiciones, ‘El Secuestro’ y ‘Qué Cachera’, se llegó a un acuerdo en el que el cantante, Mono Zabaleta, se comprometió a reconocer económicamente mis derechos como compositor. Sin embargo, este compromiso no se cumplió en los tiempos establecidos”, afirmó el compositor.
También aseguró que meses después, llegaron a un nuevo acuerdo, pero por segunda vez fue incumplido. Ante la reiterada falta de cumplimiento por parte del cantante y tras agotar otras vías de conciliación, Juan se vio en la necesidad de recurrir a las vías legales para exigir el respeto y reconocimiento de sus derechos como autor.
Entérese: Diego Daza presenta a Rolando Ochoa como su nueva fórmula
“Algunas personas han compartido versiones que no se ajustan a la realidad de los hechos, afirmando que no existió ningún acuerdo inicial o intentando desvirtuar mi postura. Quiero dejar claro que siempre he actuado de manera profesional y respetuosa, buscando lo justo sin ánimo de polémica”, anotó.
Para el artista es importante esclarecer la incómoda situación, no solo para proteger su trabajo como compositor, sino también para resaltar la importancia del respeto a los acuerdos y a los derechos de autor en la industria musical.
Finalmente agradeció a las personas que le han brindado apoyo y también hizo un llamado a los medios de comunicación y al público en general para que verifiquen la información en fuentes confiables antes de compartir contenido que pueda distorsionar la realidad.