Compartir:

Cuando la nostalgia de los años golpea irremediablemente la vida de aquellos que tienen la facilidad de la pluma para transmitir emociones, es imposible que ese sentimiento no sea trasladado a los libros.

Lea “La poesía defiende la capacidad de conmoverse”: Andrea Cote

Y eso fue justamente lo que hizo la experimentada periodista Loor Naissir, quien luego de leer que la sede del periódico en el que laboró por 28 años, EL HERALDO, iba a ser vendida, un millón de imágenes pasaron por su retina de lo que fueron esas casi tres décadas de experiencias y vivencias.

De ese proceso resultó Asomándome al periodismo, un libro en el que la oriunda de Luruaco con ascendencia libanesa, reflexiona sobre sus años en esta casa editorial y que además hace un homenaje al buen Juan B. Fernández Renowitzky, a quien llamó su primer maestro.

Asomándome al periodismo es más que un libro de anécdotas; es un puente entre el pasado y el presente del oficio periodístico.

Aquí ‘Solo un poco aquí’, de María Ospina Pizano, Premio Nacional de Novela 2024

La obra ha resonado entre lectores contemporáneos de Loor y también entre jóvenes periodistas, quienes ven en ella una ventana a una era del periodismo que ya no existe.

“Los 28 años no caben en un libro”, explica Loor. Su intención original no era rendir tributo a nadie en particular, pero el proyecto tomó un rumbo inesperado. “El libro terminó siendo, sin querer, un homenaje al director del periódico, Juan B. Fernández Renowitzky. No lo planeé así, pero al final me di cuenta de que gran parte de lo que soy como periodista se lo debo a él”.

La idea de escribir el libro surgió por una sugerencia de Martha Guarín, y el prólogo estuvo a cargo del abogado y escritor Humberto Mendieta, quien no solo valoró la narración amena de Loor, sino que la animó a publicarlo. “Aprendí a escribir fácil, para que me entendiera cualquier persona, como me enseñó el doctor Juan B”, dice.

Además ‘La Vorágine’: 100 años de un clásico que sigue vigente

El Heraldo/ArchivoEl Nobel Gabriel García Márquez rodeado por el director Juan B. Fernández Renowitzky y los periodistas Ricardo Rocha, Ameth Aguirre, Loor Naissir, Tirza Martínez, Albita Pérez, Ulilo Acevedo, Jorge Medina, Pedro Lara, Ernesto McCausland y detrás de Gabito, Pedro Acosta, nuestro conductor estrella, quien era un reportero innato. Foto El Heraldo.

Una portada histórica

Una fotografía vintage ilustra la portada del libro. En esta, una joven Loor posa junto a Fernández Renowitzky, un ícono en su vida profesional; el Nobel Gabriel García Márquez y Juan B. Fernández Noguera.

Esta elección, sin embargo, fue casual. “Buscaba una foto de mi nieto y encontré esta. Pensé: ‘Ahí estoy yo, jovencita, junto al director’. Me pareció perfecto porque sintetiza mi relación con el periódico”.

Y que apareciera Gabo le daba un plus y sumaba una anécdota más que contar. “Cuando él vino aquí al periódico, me vio y me dijo: ‘Tú eres muy niña, ¿cómo te llamas?’ Yo dije, Loor Naissir, y me responde que es un nombre raro. Entonces el director le comenta que yo era ‘importada’. Yo dije: ‘Yo soy de origen libanés’. Responde Juan B. Fernández: ‘Ella está importada de Luruaco’. Y dice Gabo con su gracia: ‘Oye, Juan B, aquí tienes el quibbe y la arepa e’ huevo”.

Lea ¡Histórico! Mujeres afro e indígenas, nombradas miembros de la Academia Colombiana de la Lengua

Lanzamiento en EL HERALDO

Para Loor, presentar Asomándome al periodismo en EL HERALDO fue un acto profundamente simbólico. “Me sentí como el hijo pródigo que regresa a casa, pero no con las manos vacías, sino con frutos recogidos gracias a lo que aprendí aquí”.

El evento fue reservado para los periodistas de esta casa editorial en el que aún estaban algunos de sus compañeros, marcando un emotivo reencuentro con el lugar que moldeó su carrera.

“En mi casa no había libros, pero había mucha literatura oral. Mi mamá, de origen libanés, me contaba historias”.

Más Ingeniero de Petróleo lanzó su libro ‘Vivir al revés’ en la FILBAC

Jesús Rueda/El HeraldoMomento del conversatorio con la directora de EL HERALDO, Erika Fontalvo.
Las letras siguen

Además de sus memorias, Loor tiene otros proyectos en curso como adentrarse en la ficción, aún marcada por la conexión con el Líbano.

“Escribir es mi manera de procesar el mundo. En mi época de periodista escribía noticias y reportajes, pero también poemas. Ahora, como escritora, puedo ir más allá y contar historias más humanas”, finaliza.