Fernanda Torres hizo historia este domingo al ganar el Globo de Oro a Mejor Actriz en una película dramática por su destacada interpretación en I’m Still Here, un biopic político dirigido por el también brasileño Walter Salles. Este triunfo marca el primero en su carrera y el segundo en la historia para una actriz brasileña.
La emoción era palpable en el discurso de Torres, quien dedicó el premio a su madre, Fernanda Montenegro, pionera en ser nominada a estos galardones hace 25 años. Subió al escenario conmovida y comenzó diciendo:
“Este es un año increíble para las actuaciones femeninas. Hay tantas actrices aquí que admiro profundamente. Por supuesto, quiero agradecer a Walter Salles, mi compañero y amigo. Esta película nos muestra cómo sobrevivir en tiempos difíciles.”
Torres también reflexionó sobre el legado del arte y su capacidad para resistir incluso en los momentos más oscuros: “Quiero dedicar este premio a mi madre. Ella estuvo aquí hace 25 años y este momento es una prueba de que el arte puede perdurar a lo largo de la vida, incluso en tiempos difíciles. Con lo que está pasando ahora en el mundo, lleno de miedo, este filme nos ayuda a reflexionar sobre cómo seguir adelante.”
En la alfombra roja, la actriz comentó que ganar el premio era como estar en Disneylandia: “Siento que estoy en un sueño y quiero conocer a todo el mundo esta noche. Así que pónganse en fila, porque una ganadora del Globo de Oro quiere hablar con ustedes,” bromeó con los periodistas presentes.
Torres no olvidó agradecer a quienes la apoyaron en su camino, mencionando a su familia, su equipo, y especialmente a Walter Salles: “A mi madre, a mi familia, a Andrusha, a Selton, a mis hijos, y a todos los que creyeron en esta película. Gracias, Globo de Oro. Esto significa mucho para mí.”
