Con tan solo 16 años, el estudiante barranquillero Cristian Echeverri ha llevado el nombre de Colombia a lo más alto, al obtener la medalla de oro en las Olimpiadas Latinoamericanas de Astronomía y Astronáutica, celebradas del 24 al 29 de noviembre de 2024 en Costa Rica.
Para este joven que se graduó el pasado 30 de noviembre como bachiller en el Instituto La Salle, este tipo de competencias se ha convertido en su hobby favorito.
En 2022, cuando cursaba noveno grado, participó por primera vez en las Olimpiadas Colombianas de Astronomía, consiguiendo el tercer puesto a nivel nacional. Este logro fue el impulso que necesitaba para seguir preparándose con disciplina. En 2023 y 2024 volvió a destacarse ganándose el derecho de representar al país en el certamen internacional.
Echeverri le contó a EL HERALDO que, además de haber vivido un reto académico, pudo adentrarse en nuevas experiencias culturales.
“Compartir con personas de diferentes países latinoamericanos es muy lindo, porque nos une una cultura similar y aprendí mucho de todos ellos”.
Lea también: Alcalde Char habilita 11 mil entradas gratuitas para la Lectura del Bando
¿Cuál fue la dinámica?
El evento incluyó cuatro retos principales, entre ellos una prueba observacional que consistía en el manejo de telescopios y reconocimiento de objetos del espacio profundo.
“También tuvimos una prueba teórica individual que trataba de la resolución de problemas que combinan física y matemáticas en un tiempo límite”.
Otra de ellas fue la prueba grupal: trabajo colaborativo con estudiantes de otros países para resolver problemas complejos.
“Por último tuvimos una prueba de cohetería, es decir, diseñar, construir y lanzar cohetes, puntuando según la distancia alcanzada y esta fue mi prueba favorita”.
En total, participaron delegaciones de 13 países, entre ellos Brasil, Uruguay y Argentina, reconocidos por su alto nivel en estas competiciones. Aunque enfrentó rivales fuertes, el joven barranquillero supo destacarse con su preparación, entusiasmo y amor por la astronomía.
Según el profesor a cargo del entrenamiento, el éxito es fruto de una combinación de esfuerzo interdisciplinario, práctica intensiva y apoyo institucional.
“Primero está el proceso interdisciplinario, donde los estudiantes, con el material que se les aporta, profundizan y ponen a prueba sus conocimientos”, manifestó Cristian Goez.
Pasión por aprender
Echeverri considera que no es un crack en matemáticas. Sin embargo, aclara que no es necesario ser un genio numérico para destacar en un campo tan complejo como la Astronomía. “Solo uso las matemáticas para estudiar lo que me gusta, resolver problemas y prepararme bien para las olimpiadas. Las matemáticas le han aportado mucho a mi vida”.
Su relación con los números no es fruto de una habilidad innata, sino de un gusto cultivado. “Mi interés por las matemáticas no tiene una razón específica, simplemente me gusta estudiar y aplicarlas. Y claro, también me apasiona la Astronomía”.
Aunque aún no tiene un “gran sueño” definido, el joven tiene objetivos claros que lo mantienen enfocado. “Estoy desarrollando metas que ojalá pueda cumplir, todavía no tengo definida la profesión, pero sé que pronto lo descubriré”.
Lea también: Falleció el poeta Manuel Patrocinio Algarín a los 107 años
Al reflexionar sobre el creciente brillo de los estudiantes barranquilleros en competencias nacionales e internacionales, señala dos factores claves: la motivación y la mejora en la calidad educativa de la ciudad.
“Cada vez hay más estudiantes brillantes, y eso es gracias al esfuerzo de las instituciones y el compromiso de los mismos jóvenes por superarse”.
El joven fue el mejor puntaje Icfes de su colegio (423) y ahora espera seguir superándose en cada reto que se le avecina.