El cantante puertorriqueño Bad Bunny, conocido por liderar las tendencias globales de la Música Urbana, ha sorprendido al mundo con su nuevo álbum Debí tirar más fotos, el cual marca su regreso a la escena musical, tras haberse tomado un año sabático.
En este trabajo, el artista decide rendir homenaje a sus raíces boricuas explorando géneros e instrumentos autóctonos como la Salsa y la Plena, en una apuesta que ha recibido elogios y generado debate en el ámbito musical.
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Las redes sociales se estremecieron y en plataformas digitales rápidamente logró adueñarse del número uno, demostrando así que es un artista polifacético que no desentona en los soneos.
Uno de los temas más destacados del disco es Baile inolvidable, una Salsa que suma 31 millones de reproducciones en YouTube y que ha cautivado a figuras legendarias como Willie Rosario, Willy Colón o Charlie Aponte, quienes no solo han elogiado la calidad de la pieza, sino también el impacto que está teniendo en las nuevas generaciones.
“Tengo que felicitarlo y agradecerle porque aquellos que siempre opinan que la Salsa va en decadencia, esta grabación ha traído a todos sus fanáticos jóvenes a escuchar y despertar el interés de bailarla. Ahora en mis presentaciones noto público joven disfrutando de mi música. Otro artista urbano que va por el mismo carril es Rauw Alejandro. Me alegro mucho porque los salseros de la nueva generación van a tener muchas oportunidades”, expresó el centenario percusionista Willie Rosario.
Otro punto alto del álbum es Café con ron, un tema que Bad Bunny interpreta a ritmo de Plena, género profundamente arraigado en la cultura puertorriqueña. En ese sentido EL HERALDO consultó al puertorriqueño Henry López, líder de Plena Nova, quien destacó la importancia de esta propuesta: “Lo que hizo Bad Bunny con Café con ron es un puente entre generaciones. Así como Ismael Rivera internacionalizó la Plena en los años 50 junto a Cortijo. Unos 50 años después llegó el artista número uno a nivel Global (2006) Ricky Martín y grabó junto al mejor grupo de Plena que ha existido (Viento de Agua de Tito Matos) el tema Pégate. Ahora Bad Bunny la lleva a una audiencia global, rompiendo barreras y récords. Esto me recuerda lo que Carlos Vives hizo con el vallenato en La tierra del olvido, llevando un sonido local a una escala masiva”.
Además de su exploración musical, el álbum incluye letras que critican la gentrificación, ese proceso de renovación urbana que desplaza a los habitantes más pobres de una zona para dar paso a personas de mayor poder adquisitivo. También lamenta la pérdida de las tradiciones de los abuelos, mostrando el lado más reflexivo del artista; ejemplo de ello es Lo que le pasó a Hawaii.
Opiniones divididas
No todos ven este movimiento con los mismos ojos. Alberto Marchena, experto en la industria musical, calificó la incursión de Bad Bunny en géneros tradicionales como “una estrategia de marketing”. Según él, “para que la Salsa o la Plena revivan realmente, debe surgir una renovación dentro del propio género, no por iniciativas puntuales de artistas de otros estilos. Esto es como cuando un artista Pop incursiona en otro género solo para volver a su zona de confort después”.
Sin embargo, Daniel Pérez Urzola, director de la emisora Olímpica Stereo, aplaudió el riesgo asumido por el cantante: “Bad Bunny no solo lanzó un álbum; creó una experiencia. Desde la carátula hasta la promoción, todo está diseñado para conectar con las raíces de Puerto Rico y mostrarle al mundo su cultura, es un hito musical revolucionario”.
Un impacto global
El impacto del álbum se ha sentido también en Barranquilla, donde amantes de los ritmos tropicales como Werner Barros han destacado el compromiso del artista con su identidad.
“Escuché Baile inolvidable, refleja el compromiso del cantante con su identidad y su tierra natal. Algo para destacar es que les dio la oportunidad en el acompañamiento a estudiantes de la Escuela Libre de Música de Puerto Rico ‘Escuela Pablo Casals’. Bad Bunny es el artista número uno de la música latina, de seguro va llevar este movimiento de la Salsa a la cima y va conquistar a las nuevas generaciones que están ya inquietas con este fenómeno”.
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Para Sebastián Mercado, de 21 años, estudiante de Arquitectura, la apuesta de Bad Bunny lo llenó de curiosidad al punto de explorar álbumes de salseros consagrados.
“Soy poco de escuchar Salsa, pero esto que hizo Bad Bunny me gustó, y hoy estoy escuchando canciones de Willy Colón y Rubén Blades”.
