La muerte de Alfredo De la Espriella, ese que supo resguardar la memoria de Barranquilla, se llora en toda la ciudad.
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Su legado puede evidenciarse no solo en el Carnaval de Barranquilla, siendo el que más Bandos escribiera en su historia, sino con obras como el Museo Romántico, ese que ha logrado sobrevivir al paso del tiempo.
Precisamente, el museo, ese que están enclavado en pleno barrio El Prado de su amada Barranquilla, despidió a su fundador con un corto pero sentido mensaje en sus redes sociales, calificándolo como el hombre que educó e inspiró a toda una ciudad.
“Hoy nos deja el hombre que educó e inspiró a toda una ciudad. Alfredo de la Espriella, maestro de generaciones, se despide, pero su legado quedará para siempre en nuestra historia. Gracias por tanto. Descansa en paz. ¡GRACIAS ALFREDO GRACIAS!”, escribió en redes sociales el museo.
Aquí Alfredo De la Espriella, el eterno luchador de la memoria histórica de Barranquilla
De igual forma, en un comunicado indicaron que desde la Familia De La Espriella, la Junta Directiva y el equipo de vigías por el legado de Barranquilla del Museo Romántico, lamentaban profundamente la partida de Alfredo De La Espriella.
“Su amor por nuestra ciudad y su incansable trabajo por preservar su memoria e identidad dejaron una huella imborrable en nuestra historia. Estamos convencidos de que este museo será siempre el mejor homenaje a un hombre extraordinario, cuyo legado seguirá vivo en la Barranquilla construida con amor, tesón y visión”.
Renglón seguido añadieron: “Hoy más que nunca, reafirmamos nuestro compromiso de continuar su labor, recuperando el museo que creó con tanta pasión y rescatando el invaluable patrimonio que nos permite recordar quiénes somos”.
El escritor e historiador que el próximo 6 de febrero cumpliría 99 años, se consideraba “el más barranquillero de todos”.
Tal vez eso fue lo que lo motivó a luchar durante toda su vida por recuperar los elementos que acercaran a las nuevas generaciones a sus antepasados y conocer la manera en la que estaba organizada la ciudad económica, social y culturalmente.
Así nació el Museo Romántico el 7 de abril de 1983, su sueño hecho realidad, el lugar donde la creatividad era protagonista y el escenario de encuentros de grandes personalidades como: Amira de la Rosa, Meira Delmar e incluso Gabriel García Márquez, quien lo catalogó como ‘el historiador de Barranquilla’, sí hasta el mismísimo Gabo lo reconoció como ese guardian de la memoria barranquillera.
En el museo se encontraban objetos, fotografías y documentos originales relacionados con la historia de la ciudad desde sus inicios a orillas del río Magdalena hasta el desarrollo moderno como capital del Atlántico.
Sin embargo, en el año 2018, De la Espriella tomó la decisión de dejar la dirección de este espacio, por causa del Alzheimer, una enfermedad degenerativa que lo mantuvo alejado de la vida pública.
Otras reacciones
Una de las primeras organizaciones en manifestarse fue Carnaval de Barranquilla S.A.S.:
También Muere Alfredo De la Espriella, el guardián de la historia barranquillera
“Lamentamos la partida del ‘Gran Bandolero Mayor’, el guardián de la memoria histórica de Barranquilla. Despedimos a quien durante décadas fue el ingenio del Bando y dio vida a los decretos que daban rienda suelta a nuestra alegría. Paz en su tumba, que su pasión y entrega por la historia y el Carnaval de nuestra ciudad sean ejemplo para las nuevas generaciones”.
Y es que Alfredo no solo escribía historia: la preservaba, la contaba, estaba presente en cada esquina del Museo Romántico, ese refugio de recuerdos que por 30 años fue su templo.
Así lo recordó Alexis Castillo, quien destacó su gran amor por la ciudad:
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“Lamentamos la muerte del historiador Alfredo de la Espriella, un hombre que demostró un gran amor por nuestra querida Barranquilla. Durante 30 años preservó y custodió en el Museo Romántico la historia de la ciudad y el Carnaval. Nuestra solidaridad con sus familiares y amigos”.
