Verdaderas obras de la más inspirada artesanía se pasearon este sábado por el Cumbiódromo de la Vía 40, durante la Batalla de Flores, desde donde la monarquía de la carnestolendas –encabezada por la reina Tatiana Angulo Fernández de Castro y el rey momo Gabriel Marriaga–, acompañados de un bello ramillete de algunas de las mujeres más hermosas del país, conectaron con un alegre público, que también se vieron maravillados por el reflejo de la tradición y las historias narradas desde las carrozas.
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Y es que anda más salir la primera al ruedo, la del Rey Momo, Gabriel Marriaga, se sabía que iba a ser una jornada llena de sorprendentes obras, que querían transmitir un mensaje en su construcción.
Más atrás, la segunda en captar la atención de los asistentes fue la llamada ‘Vieja Guardia’, una reminiscencia de las más tradicionales expresiones del Carnaval de antaño, con figuras que iban desde los Coyongos, Drácula, pasando por la ‘Negrita Puloi’, hasta llegar a la ‘María Moñitos’, un emblemático personaje arraigado en el corazón de los barranquilleros, durante muchas décadas.
Los Reyecitos con Macondo
Uno de los puntos más esperados fue la presentación de los reyes infantiles de la fiesta, Victoria Ceballos Cure y Samuel Bermúdez Cepeda y Roca, pasearon ante los presentes con la carroza ‘Fantasía Macondo’, con la cual se destacó el legado del realismo mágico del novel Gabriel García Márquez, cuya fuerte presencia en las tradiciones todavía perdura como un legado extraordinario en la esencia del ser Caribe.
Entre tanto, ex reinas como la barranquillera Valerie Domínguez Tarud, una de las más aplaudidas por su simpatía, que no dejó a nadie indiferente, como la de las muchas reinas de belleza que deslumbraron son sus sonrisas, mientras hacían llover las flores desde las carrozas.
El paso de la reina Tatiana
El punto álgido de la tarde fue la presencia de la carroza de la reina Tatiana Angulo Fernández de Castro, la que todos querían ver, que llegó puntual a la cita inmersa en su majestuosidad real, en una carroza llamada ‘Sinfonía de Pasión’, la misma que hizo sentir con una entrega a prueba de cualquier duda, en cada saludo, beso enviado o flor lanzada a sus súbditos reales.
La estructura estaba bordada de flores palmo a palmo, con una soberana que en la punta más alta invitaba a pasarla ‘bacano’, como ella siempre lo ha dicho a los suyos.
Otros montajes muy destacados fueron por ejemplo, ‘Tradición Torito’, con una móvil figura del Torito de Carnaval, que movía sus cuernos batiéndolos contra el viento en una sensacional demostración.
Así mismo, entre las carrozas con movimiento destacó la ‘Guayabero’, una ingeniosa obra en la cual una efigie gigante de monocuco se retira su máscara, al tiempo que su rostro va girando, mostrando las muchas personalidades que pueden haber detrás de una careta, la cual era comandada por la ex reina de la fiesta, Valeria Charris.
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Así mismo resultó interesante la propuesta ‘Africanismo’, cargada de una propuesta salvaje, con animales selváticos, coronada por un enorme elefante que levantó la admiración de todos en el Cumbiódromo.
Y en ‘Fiesta Alegre’ se reflejó el estallido de color y júbilo que encapsula el espíritu festivo del Carnaval con las casas de Barrio Abajo, los pick ups, y figuras de la fiesta como congos y animales, simboliza la unión de todos los barranquilleros en una misma celebración.
