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A propósito de la prima que les corresponde a los trabajadores en la mitad de año, muchas tiendas por departamentos suelen realizar grandes descuentos en muchos productos para atraer a los usuarios. Sin embargo, hay otras tiendas más pequeñas, algunas sin sede física, que también ofrecen promociones. De todos estos se aprovechan los estafadores para engañar a los compradores.

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Por todo esto, es necesario tener en cuenta algunas recomendaciones para evitar las estafas.

Precios demasiado bajos: si un producto tiene un precio significativamente inferior al que se encuentra en otras tiendas, es probable que se trate de una estafa.

Falta de información de contacto: un sitio web legítimo debe tener información de contacto clara y completa, incluyendo dirección física, número de teléfono y correo electrónico. Si no encuentra esta información, desconfíe.

Opiniones negativas: busque opiniones sobre la tienda en internet antes de comprar. Si encuentra muchas opiniones negativas, es probable que se trate de una estafa.

Políticas de devoluciones y envíos poco claras: un sitio web legítimo tendrá políticas de devoluciones y envíos claros y fáciles de encontrar.

Presión para comprar: si un vendedor lo presiona para que compre de inmediato o le ofrece un descuento por tiempo limitado, es probable que se trate de una estafa.

Solicitud de datos personales innecesarios: cualquier página web solo le pedirá la información personal necesaria para completar la compra.

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Por otro lado, también hay ciertos tips que pueden ayudar a identificar la estafa en compras por internet. Por ejemplo, los errores ortográficos o gramaticales; formularios de pago inseguros, es decir, si el sitio web solo le permite pagar mediante transferencia bancaria o tarjeta, es mejor no comprar.

Asimismo, se menester estar atento a otros tipos de engaños comunes durante época de compras por internet, como el llamado ‘Phishing’, que no es más que el envío de correos electrónicos o mensajes de textos que imitan ser de una empresa con el objetivo de obtener información personales como datos o contraseñas. Uno parecido es el ‘Smishing’, que también se trata de un mensaje de texto, simulando una entidad bancaria o institución, pero con un link, de igual forma con la intención de 'robar' datos.

Otro método común para estafar es la creación de páginas web de venta de productos falsos, que en realidad no venden nada y pretenden obtener información personal.