El único destello de luz que ven los habitantes del cabildo indígena de Panseñor después de las 6 de la tarde es el que sale de los mechones ubicados en las residencias de las 164 familias que lo conforman.
Ya ha pasado medio siglo desde que llegaron los primeros indígenas a esta población, y desde entonces la única luz que nunca se ha apagado es la de la esperanza de que algún día puedan contar con el servicio de energía.
Los niños han tenido que idearse decenas de juegos para pasar sus ratos libres, generaciones enteras se han hecho hombres sin tener contacto con un televisor y solo toman agua fría cuando tienen el dinero para comprar las cubetas de hielo en sectores aledaños.
Cansados de no ser escuchados un grupo de habitantes liderados por Efraín Mendoza decidieron hacer una protesta poco usual que se salía de los parámetros de las leyes indígenas, pero que de igual forma fue aceptada como medida desesperada de hacer justicia.
Cinco de los 500 habitantes decidieron meterse al cepo— instrumento utilizado por los indígenas en lo que se sujetan los pies como señal de castigo— como protesta y así llamar la atención del alcalde Alejandro Sierra Marzán que, según ellos, es el encargado de responder por esta problemática.
'Si no nos cumple en un mes nos vamos a tomar la alcaldía. No tenemos luz en las noches, solo nos salvan las velas y los mechones que ponemos. Es tanta la problemática que los alumnos solo reciben clases hasta las seis de la tarde porque a esa hora se va el sol' anotó el líder indígena.
Añadió que los salones donde los alumnos reciben clases no tienen abanicos por lo que el rendimiento no es el mejor además, el Ministerio de Educación donó 5 computadores hacen meses y no han podido ser utilizados por obvias razones, de ahí que las clases de informática solo son teóricas.
Este medio conoció que el ministerio de Minas envió al alcalde una comunicación el 13 de agosto de 2013 donde aprobaba la financiación para la construcción de proyectos de electrificación rural, pero aún no se ven las obras.
A través de un comunicado de prensa el alcalde manifestó que el proyecto fue presentado al Fondo de Apoyo Financiero para la Energización Rural (Faer) del Ministerio de Minas y Energía, que aprobó la financiación del Proyecto Electrificación Rural de las veredas Panseñor, Don Luis y Betania.
Este proyecto fue otorgado a la empresa Electricaribe que tendrá la función de construir, administrar y operar el proyecto.
Funcionarios de la oficina de Planeación Municipal manifestaron que en la actualidad se encuentra en proceso la legalización de servidumbres de los predios donde serán instalados los postes y redes de energía.
Efraín Mendoza sostuvo que aunque solo duraron dos horas en el cepo, resultó más efectivo que 50 años de protesta porque por fin el mundo conocerá la realidad de este corregimiento.