'Van a morir, parece marica, camine, peleen, caminen', son algunas de las frases que se escuchan en un video que fue divulgado por La FM y en el que se aprecia a unos infantes de Marina de la Base de Entrenamiento e Instrucción de Coveñas, Sucre, que son agredidos y amenazados por un superior vestido de guerrillero.
En el hecho, que ocurrió en una finca del municipio de Toluviejo, aparecen los infantes en interior y caminando en círculo en un terreno fangoso.
Los infantes permanecen con los ojos vendados, encadenados y a pie descalzos, al tiempo que son golpeados.
Según reveló La FM, se trata de un curso avanzado de combate que dura dos días y es realizado por instrucción del Centro Internacional de Entrenamiento Anfibio.
Según un boletín de prensa enviado por la Armada Nacional, desde hace 15 años han desarrollado el Curso Básico de Combate en Coveñas, con el fin de brindar a los oficiales y suboficiales las capacidades tácticas para enfrentar sus funciones en beneficio de la seguridad y defensa de los colombianos.
'Los entrenamientos militares en esencia son exigentes, tanto en lo intelectual como en lo físico. En todo curso militar hay condiciones extremas, que bajo ninguna circunstancia justifican el maltrato físico', dice el escrito.
Sin embargo, enfatizaron en que es lamentable un comportamiento aislado de algunos integrantes de la Armada Nacional que desdibuja las políticas institucionales de buen trato.
Esto fue ratificado por el comandante de la Primera Brigada de Infantería de Marina, coronel Luis Jorge Gómez Gómez, quien lamentó el hecho porque no están de acuerdo con este tipo de entrenamientos que van en contra de los Derechos Humanos y la dignidad de la persona.
'No sé cuándo ocurrieron los hechos, pero no son recientes, y por ello ya la institución había tomado acciones y hay un proceso penal abierto. Me sorprendió el video porque nosotros dentro de la Infantería de Marina no manejamos este tipo de entrenamientos', puntualizó.
Debido a esta conducta, en la Armada Nacional decidieron fortalecer los controles para este tipo de actividades y revisión detallada de los planes de instrucción y entrenamiento de los cursos de combate que se desarrollan en las escuelas de esa institución.
Asimismo se anunció el retiro del servicio activo de los instructores y encargados del entrenamiento: dos oficiales y tres suboficiales, así como la apertura de las investigaciones penales y disciplinarias correspondientes.