Josué Francisco Pantoja Martínez parte hoy de la Plaza de Majagual para recorrer, por segunda vez en siete años, 1.077 kilómetros por la paz.
Este representante de los mototaxistas decidió por primera vez medírsele a esta hazaña el 10 de mayo de 2008, cuando trotó desde Sincelejo hasta Bogotá, con el propósito de entregarle un mensaje de paz al presidente Álvaro Uribe.
'En esa oportunidad me fue muy bien, oré durante todo el camino y en los pueblos donde iba llegando me ofrecían comida, dormida y ropa. Fue un gran momento y siento que mis oraciones y mi mensaje de paz ayudaron para que liberaran a algunos secuestrados', dice Pantoja.
Este año su meta es hablar con el presidente Juan Manuel Santos y con el senador Álvaro Uribe 'porque si estamos buscando la paz, cómo ellos van a estar peleando, no tiene lógica ni razón de ser, hay que disminuir todo tipo de contienda. Solo quiero que la paz en Colombia funcione entre el mandatario pasado y el presente, que se den un abrazo sincero'.
Pantoja, padre de tres hijos, decidió emprender una vez más su sueño de aportar un grano de arena por la paz. En esta oportunidad irá con una cruz a cuestas. La fabricó con mangle, mide 2.80 metros de largo, 1.60 de ancho y pesa de 30 kilos. Fue pintada por Pantoja con el tricolor nacional, un mensaje implícito en medio de un elemento que por sí tiene su valor en la fe.
'Pinté el madero vertical de amarillo porque simboliza la riqueza de Nación que está divida entre dos partidos, el Conservador (azul) y el Liberal (rojo) y esto no debe ser así, no es cuestión de partidos, sino de unidad, la riqueza es de todos. No se puede olvidar también que el azul son los mares y el rojo la sangre de los que han luchado por la libertad', explica.
Este año decidió llevar una cruz siguiendo un mensaje que dijo Jesucristo: 'El que quiera venir en pos de Mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame', y para Pantoja tomar la cruz es ayudar al prójimo y luchar contra el enemigo.
Desde hace cerca de tres meses camina entre 15 y 20 kilómetros diarios para preparase físicamente para este largo recorrido en el que espera durar 35 días que incluyen estaciones en veredas, corregimientos y municipios de departamentos de Sucre, Bolívar, Magdalena, Cesar, Santander, Boyacá y Cundinamarca.