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Sincelejo. Al tiempo que familiares, amigos y alumnos asistían al sepelio de la docente Marcelis Méndez Bertel en el norte de Sincelejo, se entregaba ante la Sijin y el CTI de la Fiscalía uno de los presuntos autores de su muerte. Se trata de un joven de 17 años al que apodan ‘el Candela’ y quien sería el que iba conduciendo la moto en la que interceptaron a la profesora el martes a las tres de la tarde en la puerta de su vivienda de la Calle Sucre cuando sobre Sincelejo caía un fuerte aguacero y se transmitía por televisión el juego entre las selecciones de Colombia y Argentina.

Este crimen ha generado el rechazo ciudadano, incluyendo al magisterio del departamento, que indignado por la ola de inseguridad que ha golpeado al gremio, anunció que el martes 24 de noviembre se declaran en cese de actividades por 24 horas.

El Comando de Policía de Sucre había ofrecido una recompensa de 10 millones de pesos para quien entregara información sobre los autores de este homicidio.

El coronel Henry Jiménez, comandante encargado de Policía en Sucre, informó que los responsables del asesinato obligaron a la docente a entregarles el bolso que llevaba. 'Por demorarse le dispararon', anotó el oficial.

Marcelis Méndez era madre de dos adolescentes, uno de los cuales la condujo al Hospital Universitario de Sincelejo (HUS) donde falleció minutos después.

El oficial precisó que en los operativos para dar con los responsables fue inmovilizada una motocicleta con características similares a la que utilizaron para el crimen y que los responsables están identificados.

Edinson Arrieta, presidente de la Asociación de Educadores de Sucre (Ades), repudió este nuevo acto de violencia contra el gremio, al tiempo que instó a las autoridades a garantizar la seguridad de los sucreños.

El directivo invitó a la ciudadanía a sumarse a la movilización del martes 24 desde las ocho de la mañana, desde la plazoleta de El Pescador. El objetivo es rechazar la ola de violencia que azota a Sincelejo y Sucre, exigir el derecho a la vida, a la seguridad de los ciudadanos, y que las autoridades civiles y de fuerza pública respondan con contundencia ante el accionar de los delincuentes. La familia de la docente se abstuvo de referirse a este caso.

'Una gran mujer'. Jorge Luis Viloria, compañero de trabajo de la docente en el municipio de Coveñas, la recordó como 'una gran mujer, educadora y mamá'.

'Era una mujer que se daba a querer con todo el mundo por su gran carisma. Orientaba la cátedra de español y literatura desde hacía 15 años en Coveñas', dijo Viloria, quien la vio por última vez con vida el viernes cuando viajaron juntos en motocicleta.