Sincelejo. Sucre se sumó ayer a la lista de departamentos que, ante los graves efectos del fenómeno de El Niño, han declarado la calamidad pública para la gestión de recursos con los cuales atender esta emergencia.
El gobernador Édgar Martínez Romero decretó esta medida después de reunirse con el Consejo Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres, organismo del que escuchó un informe acerca de la crisis por la intensa sequía.
El Niño ha causado en este departamento la pérdida de miles de hectáreas de cultivos, enfermedades y muertes de animales, así como la desaparición de pastos y el desabastecimiento o racionamiento de agua en algunas poblaciones.
El sector apícola ha reportado la fuga y muerte de miles de abejas a causa de la baja floración.
El transporte es otro de los sectores golpeados, pues en la Mojana es difícil y en muchos casos imposible la navegabilidad por la formación de montículos de tierra, mientras que en esa misma subregión muchas vías se han agrietado e impedido el tránsito.
Uno de los primeros municipios en declararse en calamidad pública en Sucre es Sincelejo debido a la falta de agua tanto potable como para otros usos en la zona rural, conformada de 20 corregimientos.
El Ministerio de Vivienda lo incluyó en la lista de 111 municipios en monitoreo especial por posible desabastecimiento parcial de agua, lo mismo que a otras localidades de Sucre.
Jacobo Quessep Espinosa, alcalde de la capital sucreña, anunció el envío de carro tanques y la firma de un convenio con un acueducto del Golfo de Morrosquillo, limítrofe con Sincelejo, con el fin de llevar agua al corregimiento La Arena, uno de los más extensos.
Otros municipios que se adelantaron al departamento de Sucre en la declaratoria de la calamidad pública son Ovejas, Sincé, Toluviejo, Galeras, Sincé, Colosó y Sucre.
La Gobernación informó que contratará camiones cisterna para el suministro de agua, adecuará pozos profundos, construirá reservorios, gestionará ayudas alimentarias y rehabilitará las vías intransitables. Las medidas serán ejecutadas a corto plazo, según las prioridades de necesidad.
A comienzos de enero la gobernadora de La Guajira, Oneda Pinto, y el mandatario de Bolívar, Dumek Turbay, entre otros, adoptaron la misma medida para afrontar la emergencia que se registra por el Fenómeno del Niño.