Sincelejo. El Tribunal Superior del Distrito Judicial de Sincelejo ratificó en todas su partes la sentencia del 30 de septiembre del año 2014 a través de la cual el Juzgado Único Penal del Circuito Especializado de esta ciudad absolvió al desaparecido jefe paramilitar Rodrigo Mercado Peluffo, alias 'Cadena', del delito de homicidio agravado y tentativa de homicidio.
La decisión de primera instancia había sido apelada por la Fiscalía 12 Especializada de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario porque no estuvo de acuerdo en que 'Cadena' fuera absuelto de la culpabilidad de los hechos ocurridos el 5 de junio de 1996 cuando un grupo de paramilitares incursionó al caserío El Martillo, en el municipio de San Antonio de Palmito, y asesinara a los hermanos Sergio Manuel y Dagoberto Santero Basilio, así como a Carlos Arturo Solano Berna y lesionaran a Melesio De la Cruz Ciprián.
El Juzgado luego de analizar las pruebas allegadas al proceso pudo extraer de los elementos probatorios compilados, y de las declaraciones vertidas por los testigos, que el nombre del procesado, es decir, de alias 'Cadena' no aparece como autor o partícipe de esos hechos, y quienes lo hacen son dos testigos cuyas versiones no son claras y después se retractan.
En la apelación, la Fiscalía, advirtió que el juez realizó una valoración errada o no valoró algunos elementos de prueba tales como que la zona donde ocurrió la masacre fue de influencia del grupo paramilitar que 'Cadena' comandaba.
El ente investigador estimó que 'la responsabilidad del encausado debió ser analizada en dos direcciones, y no solo aquella referida a su participación directa en los homicidios, pues se estaba frente a una organización criminal, con el poder de obtener sus propósitos delincuenciales, usando el terror como medio'.
Finalmente la Sala de decisión penal del Distrito Judicial de Sincelejo coincidió con la juez en que los los testigos traídos por la Fiscalía no cuentan con un conocimiento certero de la responsabilidad de Mercado Peluffo en los hechos de sangre, habida cuenta de que dentro de sus relatos hacen referencia más a las situaciones de orden público, a la militancia de grupos paramilitares y a las generalidades del hecho, que a lo ocurrido al momento mismo de la masacre en El Martillo.