Sincelejo. Un panfleto en el que amenazan a 20 docentes de la Institución Educativa Nueva Esperanza, ubicada en la zona sur de Sincelejo, hizo que las clases para cerca de 2 mil estudiantes en ese plantel fueran suspendidas desde ayer y que las directivas y maestros se declararan en asamblea permanente.
El escrito en el que intimidan a los 20 profesores, 17 de la jornada matinal y tres de la vespertina, llegó el viernes en la tarde a las manos de la rectora Íngrid Rivera, quien lleva ocho meses en el cargo en reemplazo de Flaminio Díaz, que fue reubicado, al igual que un coordinador de ese plantel, también por amenazas.
Ayer los estudiantes de prescolar y los del bachillerato llegaron a sus clases bien temprano, como de costumbre, pero fueron devueltos porque los docentes aseguran que no van a continuar con la jornada académica hasta tanto las autoridades no les ofrezcan las garantías necesarias para ello dado que las amenazas, intimidaciones, atracos y ‘pago de peajes’ son una constante en el colegio y nadie responde.
EL HERALDO estuvo ayer en el colegio y conoció el panfleto, pero este no fue suministrado porque los maestros no quieren que sus nombres sean divulgados. El documento está encabezado por unas manchas de sangre que a su vez son limpiadas con un trapero y seguidamente advierte 'para que quede depurada la institución deben irse los docentes' y es allí donde vienen los 20 nombres que incluyen tanto hombres como mujeres, docentes y coordinadores.
Uno de estos últimos que lleva 12 años en la escuela precisó que si bien esas amenazas son una rutina en el plantel educativo, eso los atemoriza porque 'debido al entorno en el que se ubica el colegio nos vemos expuestos a atracos dentro y fuera del plantel o al pago de peajes que es la entrega de dinero. Por eso solicitamos a las autoridades que le presten atención a este tema y que investiguen para que se esclarezca la procedencia de ese documento'.
Por su parte el maestro Segundo Salas reiteró que 'desde siempre se han sentido intimidados por los enemigos de la paz y la concordia, y la respuesta de las autoridades pertinentes ha sido muy tímida'.
Tanto Salas como el presidente de la Asociación de Trabajadores de la Educación en Sincelejo (Asodes), Álex Manuel Sierra, advirtieron que el Plan Padrino de la Policía Nacional, que consiste en tener presencia casi que permanente de los uniformados en las afueras del plantel, no se está cumpliendo.
