La Contraloría Departamental de Sucre reveló que, en desarrollo de una auditoría, detectó 39 hallazgos entre administrativos, disciplinarios, penal y fiscales en el manejo de la Universidad de Sucre.
Las presuntas anomalías fiscales superan los $3.000 millones, por lo que consideró que el control financiero y presupuestal es desfavorable.
Uno de los hallazgos fiscales es por $118 millones, de un contrato de compraventa para la sala Génesis, pero de este no hay soporte de la modalidad de contratación y no se publicó en el Secop.
Un hecho similar ocurre con el contrato de compraventa de aires acondicionados para la sede de Puerta Roja, por $218 millones; compraventa de libros para la biblioteca Pompeyo Molina, por $305 millones; compraventa de sillas universitarias, por $339 millones; e insumos para el programa de investigación para el desarrollo de productos biotecnológicos por $764 millones, entre otros.
La auditoría logró establecer, además, que hay inconsistencias en los registros contables de las propiedades, planta y equipos.
Con los hallazgos el rector de Unisucre, Vicente Periñán Petro, debe responder por procesos ante la Contraloría, la Procuraduría y la Fiscalía.
