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Con el pasar de los años se acrecienta la problemática de la poca afluencia de turistas en la subregión del Golfo del Morrosquillo, otrora uno de los principales destinos del país.

Héctor Conde Rangel, directivo de la Asociación de Empresarios Turísticos del Golfo, manifestó que las temporadas altas son cada vez más cortas, en la actualidad la ocupación de camas es del 5% en reserva, a pesar del puente festivo.

Han sido muchos los factores que han incidido en esto, algunos de ellos y que hace solo unas semanas se convirtió en un escándalo nacional, fue el mal manejo de los recursos para obras de mitigación de erosión costera y recuperación de playas.

Otra problemática que impactó grandemente según manifestó Conde fue el derrame de crudo en dos oportunidades en el 2014.

'Esto ha perjudicado mucho porque quedan secuelas en el tiempo y tenemos pruebas de sobra que en su momento se la aportamos a los abogados', dijo.

El más reciente de los obstáculos y que en reiteradas ocasiones ha sido expresado por los hoteleros es la instalación del peaje La Caimanera, en el sector turístico entre Tolú y Coveñas.

'Eso hizo que la temporada de fin de año bajara en un 30% en comparación al año anterior, perjudicó mucho porque para ir de un municipio a otro debían pagar $11.800 ida y regreso', explicó.

El directivo, dijo que el turismo ha ido en retroceso con tanto problema que supuestamente son aportes para el desarrollo de la región, como el transporte de petróleo y la instalación del peaje.

Esto ha repercutido en ambos municipios donde sus economías basadas en el turismo se han visto golpeadas y algunos sitios comerciales, entre ellos restaurantes y hoteles, se vieron en la obligación de cerrar sus puertas.