El costado del antiguo hospital de Sincelejo, hoy llamado Unidad Intermedia San Francisco de Asís, tendrá en los próximos días otra cara con la reubicación de los comerciantes informales que durante casi cuatro décadas han ocupado ese espacio público.
La Alcaldía de Sincelejo entregó ayer las llaves de las nuevas casetas en las que los vendedores deberán establecerse para dar paso a la remodelación de las calles del Centro y a la recuperación de andenes.
Teobaldo Núñez Rodríguez, secretario del Interior de Sincelejo, informó que se trata de una aceptación pacífica desde la calle 20 a la calle 18, a cuatro cuadras del sitio inicial donde los comerciantes ejercían su actividad.
'Conseguimos unos hitos para un sendero peatonal y, con alumbrado público, la iluminación. Sabemos que (la 18) era una calle que estaba sin comercio. Hoy tiene todo un grupo y va a ser vigilada por la Policía', explicó.
Núñez señaló que con la reubicación se garantiza el derecho al trabajo que la Corte Constitucional le reconoció a este tipo de vendedores en el país, en una sentencia que habla de la 'confianza legítima'.
'Las personas que se van a reubicar son, en su gran mayoría, para la actividad de joyería. No podemos poner maquinaria en todo el espacio público. Lo que se busca es despejar el espacio público', detalló.