El Juez Primero Penal Ambulante de Sincelejo con funciones de control de garantías le impuso medida de aseguramiento de detención preventiva en establecimiento carcelario al investigador del CTI de la Fiscalía, Luis Alfonso Arrieta Pérez.
Por su condición de servidor público de hace 23 años, le corresponderá estar privado de la libertad en el Establecimiento de Reclusión Especial (ERE) de Corozal.
El juez Jaime Navarro Galindo acogió en todas sus partes la solicitud que le hizo la Fiscal Octava Seccional adscrita al Gaula de privar de la libertad a Arrieta Pérez porque es un peligro para la sociedad en tanto que aprovechándose de su condición de funcionario de la Fiscalía le servía al Clan del Golfo y también impactaba de forma negativa en las investigaciones que la Fiscalía adelantaba, lo que condujo, en varias ocasiones, al archivo de procesos.
El actuar delictivo de Luis Alfonso Arrieta Pérez era tan evidente, que en San Marcos, donde laboraba como investigador del CTI de la Fiscalía, lo veían departir con varios miembros del Clan del Golfo, entre ellos con el jefe financiero, de allí que muchos ciudadanos temían denunciar situaciones ante el ente investigador - acusador.
Arrieta Pérez, que fue capturado a las 9:40 de la mañana del viernes en su sitio de trabajo por tres miembros del Gaula de la Policía de Sucre, es procesado por los delitos de concierto para delinquir agravado por darse para extorsión, concusión, cohecho impropio y porte ilegal de armas de fuego, en todos en calidad de autor y bajo la modalidad de dolo, los cuales no aceptó.
Este servidor público sin saberlo estaba siendo seguido bien de cerca a través de las interceptaciones telefónicas por las autoridades que lograron establecer a través de conversaciones que este hacía pasar esa línea como institucional siendo personal y a muchas personas les pedía que le hicieran recargas, además negociaba munición e información con el Clan del Golfo y manipulaba investigaciones que le eran asignadas y se involucraba en las que no tenía participación. Esto último fue ratificado bajo la gravedad de juramento por un fiscal y por un jefe de investigaciones que advirtieron que muchos de los procesos que habían sido archivados están nuevamente siendo investigados y también dieron cuenta de las amistades públicas de Arrieta con gente del Clan del Golfo.
La Fiscalía Octava Seccional adscrita al Gaula también ordenó la incautación del celular de Arrieta y la pistola CZ75 de uso institucional a la que le encontraron munición que no le había sido asignada a este y que coincide con la encontrada por las autoridades en hechos delictivos registrados en San Marcos, de allí que ese tema también está siendo investigado.
La Fiscalía de la Unidad Anticorrupción también lo investiga con base en unas interceptaciones.
El mal proceder de este investigador quedó en evidencia a través de una investigación al Clan del Golfo en la que una fuente humana revela que hay un hombre al que llaman Arrieta que le sirve a la organización delictiva.
Arrieta, según la Fiscalía, ponía a las víctimas que serían extorsionadas.