La familia Tirado Farak afronta por estos días no solo el dolor por la trágica muerte de su hijo, el geólogo Camilo Andrés, que fue asesinado por disidencias de las Farc en Yarumal (Antioquia), sino también unas amenazas.
De estas se tuvo conocimiento en las últimas horas porque hubo en la sede de la Alcaldía de Corozal un Subcomité de Prevención y No repetición en el que este tema fue abordado por las autoridades, pero la familia en sí no se quiso referir al tema.
Por su parte el alcalde Andrés Vivero León, quien presidió el subcomité, explicó que ya fue hecho el pedido a la Unidad Nacional de Protección para que se encargue de la seguridad de los familiares de este joven víctima de la violencia.
'Estamos a la espera de que se hagan los protocolos necesarios para garantizarles la seguridad a esta familia', precisó el mandatario.
Trascendió que los amenazados son dos hermanos de Camilo Andrés, que residen en Corozal con sus padres, pero se desconocen las circunstancias en las que se presentaron esas amenazas.