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Un recluso de la cárcel La Vega de Sincelejo cayó la tarde de este viernes del tercer piso del pabellón B. Se trata de José Domingo Berrío Teherán, de 47 años, quien pagaba una condena de dos años en este penitenciario por violencia intrafamiliar.

El hombre, natural del municipio de San Onofre, habría matado supuestamente de 25 puñaladas a su compañera sentimental, María Delvis Saénz Toloza, hace más de 6 años en Venezuela, donde lo solicitaban para que respondiera por el delito de homicidio.

Se conoció que el hecho ocurrió un poco antes de las 4 de la tarde, hora de entrada de los internos a sus celdas, y las primeras hipótesis señalan que pudo haberse tratado de un suicidio para evitar ser trasladado al patio de los extraditables de La Picota, en Bogotá. 

El hombre habría notado que todos los internos ingresaban a sus celdas y que a él no lo llamaban. Fue cuando –según las versiones que se manejan hasta el momento– se subió al tercer piso del pabellón B, en el patio 4, y se lanzó. El cuerpo sin vida quedó tendido en la cancha de concreto del reclusorio.

Berrío Teherán entró como interno a La Vega el 24 de septiembre de 2017, luego de que un juez con funciones de control de garantías ordenara la privación de su libertad, tras su captura en San Onofre.

En ese entonces, un familiar de Saénz Toloza llegó de Venezuela a la capital sucreña para conocer de primera mano la investigación en contra del detenido y así informarle a sus familiares sobre dicho proceso, ya que él habría salido huyendo del vecino país, por lo que era considerado un prófugo de la justicia en esa nación. De hecho tenía una circular roja en su contra.

Berrío Teherán y Saénz Toloza tuvieron una relación de 25 años y producto de ella nacieron dos hijas que al igual que el familiar que habló en el 2017 cuando lo aprehendieron, esperaban justicia por el crimen de la mujer.