La silenciosa vida que llevaba Julay María Ascencio Herazo contrastó con el ruido que hizo su muerte. Los cinco balazos que recibió sonaron fuerte, pero más eco hacen los presuntos motivos de su trágica muerte en la capital sucreña los cuales estarían relacionados con asuntos de droga.
El homicidio de esta mujer, de 25 años, y que además tenía 8 meses de embarazo, se registró pasadas las 6:00 de la tarde del sábado en el barrio de invasión Veinte de Junio, en la zona norte de la ciudad de Sincelejo.
Los móviles del crimen de la segunda mujer que es asesinada en lo que va del 2019 en esta ciudad apuntan a que se trata de un ajuste de cuentas por cuestiones de microtráfico. Sin embargo, la Policía dice que investiga estas versiones y lo que hay detrás de la muerte de Julay.
El mayor Juan Pablo Rodríguez, comandante operativo de la Policía en Sucre, dijo que están verificando sobre el pasado judicial de esta mujer que, según la Fiscalía, tenía anotaciones por hurto.
'Se tiene conocimiento que era una persona que llevaba poco tiempo en la ciudad porque regresó hace poco, al parecer, de Bogotá. Toda la información que se pueda recopilar a los alrededores sobre los autores del crimen será valiosa en la investigación. Se tiene conocimiento que el compañero sentimental está recluido en la cárcel La Vega y se está verificando la identidad de este y desde qué fecha está internado ahí', indicó Rodríguez.
Precisamente, el sector donde fue asesinada queda a pocas cuadras de ese centro penitenciario.
Lo que sí es cierto es que a eso de las 6:15 de la tarde del sábado Julay Ascencio estaba sentada frente a una humilde vivienda de madera cuando llegó un hombre que se había bajado de una moto dos cuadras antes. Caminó por un callejón y cuando divisó a su víctima le disparó indiscriminadamente hasta dejarla tendida en el suelo.
Luego huyó. La mujer herida fue socorrida por personas del sector y a bordo de una moto la trasladaron a la Clínica Santa María en donde, al parecer, llegó sin signos vitales.
