A juzgar por la forma cómo se desarrolló la sesión de la Mesa de Garantías ayer en la sede de la Gobernación que no solo fue a puerta cerrada sino también con llave, la situación de seguridad en Sucre, en especial para los líderes sociales, no es la mejor.
Y después de 5 horas de reunión de los representantes de la sociedad civil y la institucionalidad las afirmaciones de los primeros ratificaron que la presencia de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia en Sucre, las amenazas, el crimen del líder en Coveñas y el microtráfico a gran escala, entre otras situaciones, los tienen atemorizados.
El espacio al que por primera vez en sus 4 años de mandato hizo presencia el gobernador Edgar Martínez Romero, fue aprovechado por algunos líderes como Albeiro Villamizar para solicitarle a la Fiscalía que sea más ágil en las investigaciones de las amenazas, al tiempo que denunció las intimidaciones telefónicas de las que fue víctima Jáder Domínguez tras denunciar la millonaria contratación tardía de la interventoría para el PAE de Sucre 2019.
Por su parte un estudiante de la Universidad de Sucre, donde circuló una amenaza para los líderes estudiantiles vía panfleto, se mostró en desacuerdo porque en el consejo de seguridad realizado en la alma máter para analizar este tema no fueron tenidos en cuenta los directamente afectados.
A su turno una reconocida líder de San Onofre, a la que le reservamos su identidad por seguridad, ratificó que en esta población se registran crímenes de jóvenes que se niegan a consumir y/o comercializar estupefacientes.
Al tiempo que Hugo Ramos, presidente de Sucre Diversa, denunció abusos por parte de personal de la Policía y la Infantería de Marina y estas a su vez repercuten con amenazas en contra de los directivos de esta fundación para que retiren las denuncias o de lo contrario los asesinan.