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La Superintendencia Nacional de Salud llegó ayer al Hospital Universitario de Sincelejo (HUS) a entregarle a las autoridades de Sucre un informe sobre los 4 meses que lleva la intervención de este ente asistencial de la red pública.

Los empleados, a los que les deben entre 22 y 25 meses de salario y con los que además están en mora en la seguridad social, cristicaron el hecho de que no fueron invitados al igual que los miembros del sindicato. Tampoco permitieron el acceso a la prensa a la que convocaron a una rueda de prensa al mediodía que fue cancelada a última hora.,

EL HERALDO conoció que el superintendente Fabio Aristizábal fue enfático al advertir en la necesidad de continuar tocando puertas para salvar al HUS.

Reprochó una vez más que los recursos que se destinan para la atención de pacientes en este hospital terminen en manos de abogados y jueces, 'ese es un tema que nos preocupa', señaló, al tiempo que le dijo al gobernador Edgar Martínez que la única intención de la Supersalud es salvar al Hospital, pero tiene unos pasivos muy altos.

Precisó que esta es una situación que se registra hoy en muchos hospitales del país, y recordó que los pasivos del HUS superan los 108 mil millones de pesos, pero las cuentas por cobrar están por encima de los $42 mil millones, por lo que es una situación, según él, muy complicada dado que más del 50% de esos pasivos están concentrados en créditos judiciales y honorarios de servicios personales y 455 procesos jurídicos, de los cuales 240 los han fallado en contra y están valorados en más de 33.400 millones de pesos.

'Con el Presidente de la República y la Contraloría General hemos hablado de estas situaciones y hemos logrado recuperar algunos hospitales universitarios, pero nos preocupa que haya jueces y abogados saqueando a estas entidades. Este es un tema muy importante y hay que prestarle atención porque estos hospitales no merecen esa suerte', anotó el superintendente.

Se comprometió a revisar la contratación y reactivar los servicios de salud que se requieren, anuncio que no es alentador para los empleados que desde el año anterior cuando él los visitó con el Viceministro de Salud le solicitaron el arreglo del Tomógrafo y aún eso no se cumple.

'A mí me preocupa mucho que sigamos contratando de manera aislada y privada sin integrar la red pública. Estos hospitales universitarios no pueden seguir recibiendo patologías de primer nivel. Cada quien debe asumir sus responsabilidades, no es posible que las urgencias estén llenas de patologías que han podido atender en los centros de salud de los municipios'.

El gobernador Édgar Martínez Romero aseguró que la Superintendencia Nacional de Salud es la principal responsable de la crisis del Hospital porque en anteriores administraciones del Hospital fue 'paternalista' y 'cómplice' de los malos manejos.

'Fuera de los culpables naturales del Hospital, que estuvieron al frente en ese tiempo, de la clase política que los amparó y que fue cómplice de ellos, y usted me va a excusar por lo que le voy a decir, pero se está, indudablemente, ante que, las anteriores superintendencias, son las principales responsables de lo que está viviendo'.

El mandatario también se dirigió a la agente interventora para decirle que debe haber un tratamiento especial para el centro asistencial porque Sucre es un departamento pobre, que debe atender a unas 300 mil víctimas de la violencia.

En los 4 meses de la intervención el HUS aumentó en un 90% la ocupación hospitalaria y en un 22% la facturación por venta de servicios. Además optimizó la planta de personal, lo que le permitió disminuir hasta en un 12% los costos de operación, pasando de $2.300 millones mensuales a cerca de $1.800.