El sacerdote José de Jesús Chadid Anachury completa hoy seis días como alcalde de Tolú, el pueblo en el que estuvo como párroco en una de sus dos parroquias y en el que el 27 de octubre pasado los electores le dieron su voto de confianza para gobernar en el cuatrienio 2020-2023.
Dejó a un lado los 27 años de sacerdocio porque solicitó una dispensa (permiso) a la Iglesia para ir, según él, a servirle a la sociedad desde otro escenario, como lo confirma su hermana Marianella, quien es monja de la Congregación de Hermanas Franciscanas Misioneras de María Auxiliadora. Ella sirve a Dios desde Villa Gorgona, un corregimiento de Candelaria (Valle del Cauca).
Ella lo acompañó el 30 de diciembre en la misa donde su hermano agradeció a Dios por su elección, y ratifica que 'lo de Jose siempre ha sido el servicio social y el amor por el otro', por lo que asegura que, como primera autoridad de Tolú, le irá muy bien si la gente se lo permite.
Tras el retiro de su hermano del sacerdocio para incursionar en la política, la religiosa ve una transformación en las relaciones entre ambas, que son referentes mutuos. 'Él ha sido mi líder espiritual y yo su seguridad, entonces hemos vivido momentos muy difíciles que nos han ayudado a madurar en las relaciones y decisiones'.
Pero el caso de José de Jesús Chadid no es que dejó el sacerdocio para ir a la política, sino también para dedicarse públicamente a su vida como padre de familia y compañero permanente de Katerine Urzola Romero, con quien tiene tres hijos, el mayor de 13 años, Josué, luego José Elías y María Fátima.
Cuando llegó el primer hijo del hoy alcalde de Tolú ya su familia había madurado la situación, porque, según Marianella, habían pasado momentos muy difíciles.
'Eso ya se había superado, lo difícil fue antes de que viniera la primera criatura porque él me enseñó a mí que uno debía ser de una sola pieza y entonces allí empezaron nuestras dificultades como hermanos, pero entonces decidí que él tenía que vivir su vida como él había decidido y yo dejarlo vivir', anota la hermana religiosa del alcalde Chadid, quien confiesa que ahora ora más que antes por él, por sus vocaciones, por su pareja, por sus hijos, 'porque allí es donde él es feliz y ese es el proyecto de Jesús'.
El padre-alcalde forma parte de una familia de siete hermanos: Mayra, Iván, Juan Manuel, Ana Luz, José de Jesús, Marianella y Lucy. Son los hijos de Lucila Anachury y de Francisco, quien falleció hace más de 20 años.
Como alcalde, cuenta Marianella, 'Jose' tiene un gran reto al que espera no sea inferior porque su esencia es servir. 'Y yo también soy servidora, tenemos un imán que atrae la bondad de Dios, el servicio a Dios, es un don gratuito. Si a Jose le copian, hará grandes cosas por Tolú, porque el papa Francisco hace y lo dejan hacer, pero, si a Jose le entorpecen el camino y lo que él quiere hacer Tolú se perderá de un gran hombre, un gran político y ser humano'.
Ella considera que la Iglesia y Dios no perdieron del todo a 'Jose' porque él seguirá en el servicio a los demás, 'Jesús fue un comprometido y nos trajo la salvación. Jose será sacerdote eterno, según el rito de Melquisedec', puntualiza.
