Compartir:

Desde hace un par de meses los empresarios turísticos del Golfo de Morrosquillo se han visto afectados por la pandemia de la COVID-19, sin embargo, eso no ha sido lo único adverso en esa crítica situación porque ahora se les unió una más: la extorsión.

Varios hoteleros, de Coveñas, Tolú y San Onofre, a los que por obvias razones se les omite la identidad, han recibido llamadas con pretensiones económicas a las que se les suman amenazas de muerte.

Son varios, según los denuciantes, los números telefónicos desde los que les hacen las llamadas extorsivas.

Muchas de las interlocuciones son con trampas que involucran a supuestos familiares de los hoteleros. Los extorsionistas se las remedian y mencionan hasta parientes cercanos con el fin de obtener datos personales de quien contesta o del establecimiento comercial.

'Hablan de un grupo paramilitar pidiendo vacuna para hacer limpieza social de ladrones, consumidores y expendedores de drogas, amenazando con que el que no aportara era declarado objetivo militar', advirtió uno de los denunciantes.

En varias reuniones que estos empresarios han sostenido con las autoridades, estas les han manifestado que la mayoría de llamadas provienen de las cárceles. Por eso la invitación siempre ha sido que pongan el denuncio.

Es tanta la preocupación que los hoteleros han guardado los números telefónicos con los nombres 'Extorsión 1, extorsión 2 y hasta extorsión 3' con el fin de estar prevenidos cuando reciban una llamada.

Las autoridades invitan a marcar la línea 147 para denunciar cualquier caso de extorsión.