Los habitantes de los corregimientos La Piche y Moquén, entre ellos niños, no ven pasar los días en cuarentena sin hacer nada, por el contrario han vuelto a sus saberes ancestrales.
Con barro elaboran vasijas y utensilios, y para ello cuentan con el apoyo de la Fundación FDH, Ministerio de Cultura y el Programa Nacional de Concertación Cultural.
El programa lo realizan de manera virtual para evitar la propagación del virus de la COVID-19 y ya se ven los primeros resultados como las vasijas, pocillos, ollas, múcura, tinajas, jarrones, cazuelas y platos, entre otros.
Los niños particularmente fabrican pitos de diversas figuras como palomas o gallinas que brotan melodías que representan las tradiciones folclóricas de antaño.
Mayerlis Colón Benítez, coordinadora del proyecto, manifestó que esta es una oportunidad para que niños, jóvenes y adultos se integren en familia y aprovechen para establecer relaciones de afectividad y compartir saberes.
'Seguimos haciendo los talleres y orientaciones de forma virtual, pero es importante ver la armonía y el afecto en los hogares', dijo Colón.
