A diferencia de las elecciones parlamentarias de marzo de 2018 cuando los habitantes del corregimiento Bocacerrada, en San Onofre, se negaron a participar de estas en señal de rechazo al abandono en el que según ellos los tiene el Estado, este fin de semana sí participaron de manera activa en la elección de la junta directiva del Consejo Comunitario.
La reestructuración de esta unidad administrativa que opera para las comunidades afrodescendientes era una deuda que tenía pendiente por saldar la comunidad de Bocacerrada dado que a la junta anterior se le había vencido, de acuerdo a la Ley 70 de 1.993, su período el 31 de diciembre de 2019.
El nuevo Consejo Comunitario lo preside Deivis Olivos Gómez; en la secretaría quedó Nilsa Puello Acevedo; como tesorero está Yorvis Benítez Medina; los vocales son María Concepción Ospino Torres, Misley Quintero Ortiz y Manuel Acevedo Rodríguez, y el fiscal es Édgar Rodríguez Colón, quienes integraron una de las planchas que estuvo en contienda.
Con esta figura representativa la comunidad de Bocacerrada, que la integran 180 familias que representan unas 1.000 personas, podrá participar de las decisiones estatales y de proyectos que beneficien a la comunidad.
La secretaria del interior de San Onofre, Melissa Wilches; la jefe jurídica Karen Luna, y el personero Gerardo Ruiz De los Nuevos, acompañaron el proceso de elección como garantes de la transparencia de este.
Wiston Castro Roble, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de Bocacerrada, celebró la reestructuración del Consejo Comunitario porque es un espacio que promueve la consecución de proyectos y en especial el que ellos más anhelan que es el del Canal del Dique, pues este corregimiento está situado muy próximo a este, en los límites de los departamentos de Sucre y Bolívar.
El personero destacó el modelo organizativo que tiene Bocacerrada para hacer valer sus derechos.
Bocacerrada no votó en las elecciones de marzo de 2018, pero si lo hizo en las regionales de octubre de 2019 y para ello fue necesario que una comisión de gobierno tanto local, departamental como nacional los visitara.
En su momento los nativos de este pueblo, en el que el abandono se nota hasta en la Iglesia que no tiene techo, expresaron que estaban tan olvidados que ni en época de campaña política los visitaban.
Hoy el panorama ha cambiado porque tanto la administración municipal como la departamental en estos 9 meses de trabajo ya les han llevado la oferta institucional en varias oportunidades.
