La operación comercial desde y hacia el Aeropuerto Las Brujas, en la ciudad de Corozal, se reanudó, tal y como lo habían anunciado sus administradores, desde este viernes.
Los sucreños y usuarios de esta terminal aérea tuvieron dos motivos para celebrar en tanto que además de reanudar los vuelos regresaron las aerolíneas Satena y Avianca. La primera se fue a principios de 2019 y la otra lo anunció a finales de esa misma vigencia, pero este viernes llegaron y salieron vuelos de las dos, además de Easifly que cubre la ruta hacia Medellín.
La directora comercial de Satena, Claudia Carolina Ruiz, celebró la reactivación de las operaciones tras un año de receso en esta tierra sucreña, y agregó que es muy bueno hacerlo en estos momentos cuando la ciudadanía está ansiosa de salir a conocer otros destinos dado los más de 6 meses de estar confinados y esta ruta de Satena en Sucre cumple con esos objetivos.
'Esperamos que los ciudadanos aprovechen este destino que es cercano a Mompox y al Golfo de Morrosquillo, y no descartamos la posibilidad de tener vuelos especiales', anotó la funcionaria.
Por su parte Luis Alberto Rodríguez, gerente de los aeropuertos Air plan se mostró complacido con que Satena esté de regreso al aeropuerto de Corozal y precisó que ello fue posible gracias a un trabajo con varios actores entre ellos los gobernadores y congresistas.
'Nos sentimos muy felices de que Satena haya vuelto a operar en este aeropuerto con su ruta hacia Bogotá. Tener una reapertura con estas nuevas aerolíneas es algo muy provechoso para nosotros y para la región', anotó.
Entre tanto el gobernador Héctor Espinosa Oliver, presente en el acto de reapertura, catalogó este hecho como un despertar de la economía dado que la conectividad aérea es muy importante en todos los sectores.
'Muy importante esta reactivación que se da con vigor, yo quiero decirles además que este aeropuerto será ampliado y tendremos muchas más frecuencias con aviones más grandes', precisó el mandatario de los sucreños.
La Policía de Turismo también estuvo en la reapertura, que se produce con las medidas de bioseguridad, promoviendo campañas para la prevención de delitos, entre ellos la trata de personas y el abuso a los niños.