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Este viernes se cumplieron las exequias del licenciado José María Hernández Alviz, el padre de Seuxis Pausias o alias Jesús Santrich, quien falleció la noche del pasado 23 de diciembre en una clínica en Sincelejo.

Las honras fúnebres se cumplen en el Cementerio Municipal de Toluviejo, la población en la que nació 80 años atrás.

Abdiel Hernández Solarte, uno de los 8 hijos del profesor José María, le confirmó a EL HERALDO que su padre había estado internado en la Clínica Salud Social, en Sincelejo, desde el 9 de diciembre por problemas renales dado que tenía riñones poliquísticos, además de inflamación de la vesícula, lo que le generó otras complicaciones que al final desencadenaron en su muerte.

Recordó a su padre como un hombre honesto, sincero, inteligente, muy sobresaliente, dócil y amable.

Desde hace 15 años estaba pensionado del magisterio. 

Había sido en su juventud administrador educativo en varios colegios del territorio nacional, laboró en la Universidad de Nariño como licenciado en Filosofía, rector en el Liceo Carmelo Percy Vergara, en Corozal, y de allí pasó al área de supervisión educativa en la Secretaría de Educación de Sucre.

El último cargo en el que estuvo el profesor José María, como lo llamaban, fue en la Gobernación de Sucre hace unos 10 años aproximadamente, donde se desempeñaba como líder de calidad educativa.

Abdiel Hernández dio a conocer a través de sus redes sociales el deceso de su padre, a quien cataloga en sus mensajes como el ser más maravilloso que Dios le regaló.

El pasado 25 de noviembre, la Sala 22 Especial de Decisión de lo Contencioso Administrativo del Consejo de Estado, con ponencia del magistrado Luis Álvarez, decretó la pérdida de investidura contra el desertor del proceso de paz, Jesús Santrich, representante por la Farc.

En la decisión, fechada el 25 de noviembre de 2020, la alta corte analiza la demanda de la Procuraduría y le da la razón al considerar que 'está completamente acreditado el elemento subjetivo de la responsabilidad del congresista demandado, a título de dolo'.

Agrega que 'pese a la ilicitud de la conducta, de manera libre y consciente dirigió su voluntad al incumplimiento de los deberes que su dignidad le imponían, con lo cual no solo transgredió el ordenamiento jurídico, sino que defraudó la confianza ciudadana en el marco del Acuerdo de Paz'.